Un grupo de dirigentes latinos del sur de California inició este jueves un boicot a los productos del estado de Florida en protesta contra la ley SB1718 que firmó el gobernador Ron DeSantis y que entra en vigor el 1 de julio.
"Estamos pidiendo a nuestra comunidad latina que desde hoy se fije en las etiquetas de los productos y que no compre nada que venga del estado de Florida", decía Estela Jiménez, abogada y activista de San Diego, a los clientes que llegaban a un supermercado en el sur de California.
"DeSantis está criminalizando a nuestra gente con base en su color de piel o su condición migratoria, los criminaliza para ganar votos de gente racista. Bueno, que pierda los votos de la gente a la que su descaro va a afectar en el bolsillo", dijo Jiménez.
Una residente de Chula Vista, donde se inició el boicot, dijo que luego de hablar con los activistas a la entrada del supermercado, se fijó en comprar solo productos hechos en México o hechos en Estados Unidos. "Encontré que tenían naranjas de Florida, por supuesto no las pienso comprar nunca más", aseguró Carmen García.
Los activistas planean seguir la promoción del boicot en el área de Los Ángeles, con una población de millones de latinos e inmigrantes, para luego avanzar hacia las ciudades de Phoenix y Tucson en el estado de Arizona.
"Unos días antes de que la SB1718 entre en vigor el primero de julio, vamos a ir por tierra desde aquí hasta Florida para estar allá el día que la ley racista entre en vigor", dijo la dirigente veterana Gloria Saucedo, quien se ha opuesto a leyes similares desde hace 35 años.
Saucedo explicó que el grupo ya gestionó que organizaciones a lo largo del camino del sur de California a Florida acoja y albergue a los miembros de la coalición que impulsa el boicot. Los activistas mostraban a potenciales compradores de supermercados algunos videos que circulan en redes sociales.
"Mire", dijo a LPO Luis Vega. "Mire estos videos de campos agrícolas abandonados, de construcciones abandonadas. Nuestra gente está teniendo que abandonar el estado de Florida porque el color de su piel y su origen son combustible de la campaña electoral racista de DeSantis", afirmó el comprador latino mientras le acercaba su celular a este cronista.
El grupo analista Florida Policy Institute advirtió que 1 de cada 10 trabajadores habrá abandonado su puesto o incluso el estado de Florida cuando la ley entre en vigor.
El Instituto estimó pérdidas iniciales por $12,600 millones de dólares como efecto de la SB1718, lo que equivale al 1.1% del Producto Interno Bruto de Florida.
Los datos del Instituto fueron presentados cuando todavía no consideraban la campaña de "Un día sin inmigrantes en Florida" el 1 de junio, el impacto del boicot que se promueve desde California y otro boicot más de camioneros de trailers de transporte comercial, lo que podría parar la economía de Florida.
La abogada Jiménez dijo a LPO que DeSantis apuesta a que la plataforma antiinmigrantes le proporcionará votos para su campaña electoral presidencial contra Donald Trump.
"Muy bien, dejemos que apueste a eso, pero para las elecciones presidenciales todavía faltan -17 meses--, y de aquí a noviembre del 2024 la economía de Florida puede sufrir, porque no va a ser fácil que encuentre trabajadores que hagan lo que hacía nuestra comunidad", apuntó Jiménez.
La ley SB 1718 exigirá que todos los patrones constaten electrónicamente en un banco de datos de la oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) la información y documentos que sus empleados hayan presentado para solicitar empleo.
Si los patrones fallaran en constatar documentos, serían sancionados; pero si al hacerlo se descubre que tienen empleados indocumentados o sin permiso para trabajar en el país, los trabajadores podrían ser deportados.
La misma ley exige por otra parte que las autoridades policiales desconozcan validez a las licencias de conducir para indocumentados que autorizan otros estados, entre ellos California, Illinois y ciudades de Massachusetts.
Por su parte, los conductores de camiones de carga comercial, latinos o descendientes de latinos, han advertido en redes sociales que van a unirse en boicot contra el comercio de Florida porque ese estado planea llevar a la cárcel a quienes ayuden a indocumentados en carreteras.
En una cuenta de Facebook, los camioneros advirtieron que todos los negocios de Florida sin excepción dependen de ellos para mantener sus operaciones.
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