Los cuatro republicanos que pelean por ser el plan B de Donald Trump coinciden en un punto. Ron DeSantis, Nikki Haley, Vivek Ramaswamy y Chris Christie derogarían el programa de salud Obamacare, bajo el argumento de que es costoso e ineficaz. Es uno de los pocos acuerdos de los cuatro precandidatos presidenciales, quienes debatieron por TV de forma áspera y por cuarta vez. 

Los opositores en carrera hacia La Casa Blanca pujan por quedar parados como la mejor alternativa conservadora. Se ilusionan con la posibilidad de que los múltiples procesamientos contra Trump alteren lo que parece ser una hoja de ruta jugada.  

Aunque busquen diferenciarse de MAGA, el expresidente sigue marcando la agenda del GOP. Una semana atrás, Trump reveló que estudiaba "seriamente" alternativas a la Ley del Cuidado de la Salud a Bajo Precio (ACA, por sus siglas en inglés). "Los costos del Obamacare están fuera de control. Además no es una buena cobertura médica", publicó en la red Truth Social. Lo planteó tras leer una editorial en el Wall Street Journal al respecto.

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Sus cuatro adversarios internos hicieron declaraciones similares en los últimos tiempos. "Hemos luchado contra Obamacare en Carolina del Sur tanto como hemos podido. Dijimos no a la expansión de Medicaid. Simplemente se dieron la vuelta e hicieron retroceder a todos los estados con este proyecto de ley que sabemos que no funcionó", afirmó la ex gobernadora Haley.

Hemos luchado contra Obamacare en Carolina del Sur tanto como hemos podido. Dijimos no a la expansión de Medicaid. Simplemente se dieron la vuelta e hicieron retroceder a todos los estados con este proyecto de ley que sabemos que no funcionó 

Haley está revitalizada en su campaña tras conseguir el respaldo económico de la poderosa red Koch. Cuando era gobernadora de Carolina del Sur prometió que terminaría "con un desastroso programa de atención médica y lo reemplazaría con reformas que redujeran los costos y realmente le permitieran conservar a su médico". La ex embajadora en la ONU es considerada como la menos conservadora de los republicanos en carrera. En el cuarto debate del partido rojo, Ron DeSantis intentó ponerle el mote de izquierdista. Por eso su postura respecto al Obamacare es prácticamente la única que llama la atención. 

AP

Sin sorpresa, el gobernador de Florida DeSantis aseguró que "debemos derogar Obamacare. No tengo ningún deseo de ‘mejorar' o ‘reformarlo'. Tengo la intención de derogarlo". El empresario Ramaswamy, el más trumpista de los anotados, planteó que el "Obamacare ha sido un desastre".

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Más centrista que DeSantis y  Ramaswamy, Christie aseguró que "La Ley de Atención Médica Asequible no funciona". El ex gobernador de New Jersey, a su vez el más duro en su rechazo a Trump, dijo que el plan de salud "es una ficción que no funciona y debería derogarse".

Todos estos candidatos harían que las personas mayores paguen precios más altos por los medicamentos recetados, aumentaría el costo de la insulina y aumentaría los costos de la atención médica en todos los ámbitos 

Los demócratas aprovecharon para denunciar las consecuencias negativas que una derogación de la ley tendría para 40 millones de estadounidenses. La ACA fue aprobada por el presidente Barack Obama y reforzada por Joe Biden. La vocera de la campaña de Joe Biden, Maca Casado, opinó ante este medio que "todos estos candidatos harían que las personas mayores paguen precios más altos por los medicamentos recetados, aumentaría el costo de la insulina y aumentaría los costos de la atención médica en todos los ámbitos". La venezolana Casado agregó que para "mientras para Biden la atención médica es un derecho, para los republicanos es un privilegio".

En paralelo, Biden encara una batalla de resultado abierto contra las grandes farmacéuticas de los Estados Unidos, en busca de que bajen los precios de los medicamentos. Lo hace con un ojo puesto en los votantes latinos y afroamericanos, principales usuarios del plan de cobertura.