
Rival directo de Donald Trump en la interna republicana, Ron DeSantis se vio obligado a ensayar una nueva defensa ambigua del ex presidente. Una estrategia que no satisface a Trump ni a su base de votantes. Y tampoco acerca a DeSantis con los que cuestionan su perfil conservador. Las reacciones a su mensaje por redes grafican ese efecto. Pero el gobernador de Florida necesita diferenciarse y recortar la distancia que lo separa de MAGA, incluso en su propio estado. En el condado de Miami-Dade, por ejemplo, ni siquiera la conducción del partido republicano tomó partido por el gobernador del estado.
Pocos minutos después de que se conociera la noticia de la nueva acusación, DeSantis esquivó la pregunta de si las elecciones de 2020 fueron "amañadas". Eso fue lo que Trump sostuvo una y otra vez. Pero a la vez el candidato conservador de Florida, quien aclaró que no leyó la acusación, aprovechó para atribuir a los jurados de Washington DC de un sesgo que privó a los estadounidenses que enfrentan cargos en el distrito de tener un juicio justo.
"Washington DC es un pantano y es injusto tener que ser juzgado ante un jurado que refleja la mentalidad del pantano", escribió DeSantis. "Una de las razones por las que nuestro paÃs está en declive es la politización del estado de derecho. No más excusas, pondré fin a la militarización del gobierno federal", agregó. DeSantis habÃa tenido una reacción similar ante la acusación previa.
Trump fue procesando por conspirar para obtener un segundo mandato después de perder las elecciones de 2020. AsÃ, DeSantis buscó redoblar la apuesta en su diferenciación del veterano magnate republicano. Ya lo habÃa hecho anteriormente, al prometer que él no iba a "drenar el pantano", como habÃa sostenido Trump a la largo de sus campañas. DeSantis aseguró directamente que lo iba a romper. Esa parece ser la carrera que elige el gobernador de Florida: ser incluso más anti-elite que MAGA.
También desde Florida, el senador republicano Rick Scott contraatacó con una referencia a Biden y a su hijo Hunter. "Cada vez que sabemos más sobre los negocios turbios de Biden, su Departamento de Justicia acusa al presidente Trump".
La comisionada republicana del condado de Miami-Dade, Raquel Regalado, le dijo a LPO que Trump es una persona que saca provecho de estas situaciones. De orogen cubano pero nacida en Miami, la legisladora pronostica que el ex presidente "hará del procesamiento una plataforma en su favor. Las encuestas lo certifican: cuanto más polémico, mejor para él".
El candidato republicano y empresario Vivek Ramaswamy hizo una declaración mucho más enfática en contra la nueva acusación. La calificó de "antiestadounidense" y prometió perdonar a Trump si es elegido presidente. Dijo que Trump "no es la causa" detrás de los eventos de la insurrección del 6 de enero.
En una ambigua defensa de Trump, DeSantis promete terminar con la politización de la Justicia
"La verdadera causa fue la censura sistemática y generalizada de los ciudadanos en el año anterior", dijo Ramaswamy.
Anotada en la pulseada republicana, aunque con muy pocas chances de prosperar, Asa Hutchinson fue incluso más crÃtica que DeSantis. La exgobernadora de Arkansas aseguró que Trump es "moralmente responsable" del ataque del 6 de enero. "Ahora, con la acusación de hoy, nuestro sistema de justicia determinará si es penalmente responsable", dijo Hutchinson en tuiter.
Mike Pence, ex compañero de fórmula de Trump, pero habitual crÃtico del ex presidente, esta vez tuvo una opinión menos áspera. Pence incluso enfrentó amenazas de muerte por su negativa a no anular los resultados de las elecciones de 2020 durante su certificación en el Congreso. Esta vez dijo que los problemas legales de Trump crearÃan "distracciones" de las "polÃticas económicas desastrosas" del actual presidente Biden.
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