El argentino Blas Núñez-Neto se ha convertido en un funcionario clave de la nueva etapa en materia fronteriza y aparece como el catalizador de la administración del presidente Joe Biden en medio del cambiante tema de la migración en la frontera con México.
Núñez-Neto, de 49 años, Subsecretario de PolÃtica Fronteriza e Inmigración del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), a menudo llama a conferencias de prensa en inglés y en español para actualizar sobre rápidos cambios en materia migratoria, antes de que los magnifiquen sectores extremos.
El inmigrante que llegó de Argentina a los nueve años de edad tiene que abrirse paso y presentar los hechos entre versiones que acusan a la administración Biden de promover "fronteras abiertas" y permitir la llegada de miles de migrantes a la frontera con México, o de fallar a sus promesas de reforma migratoria.
Freno a la ofensiva republicana: Mayorkas dice que bajaron los cruces ilegales más de 70%
En un terreno intermedio, Núñez-Neto tiene que apegarse a los hechos en el momento en que ocurren e informar los cambios en una dimensión apegada a la realidad.
Cuando el 11 de mayo terminaba por fin el TÃtulo 42, la medida con la que la administración Trump impidió a millones de migrantes solicitar asilo, a la frontera llegaron decenas de miles de migrantes incluso de paÃses de los que antes rara vez alcanzaban la frontera, como Perú y Colombia.
Los latinos pensaban que al cruzar la frontera, con el fin del TÃtulo 42, tendrÃan un lugar asegurado para pedir asilo y después les dejarÃan en libertad condicional, mientras avanzaban sus peticiones de asilo.
Núñez-Neto tuvo que lidiar con polÃticos y grupos conservadores que acusaban a la administración Biden de promover "una invasión" y organizaciones civiles y polÃticos que la criticaban por las condiciones de abandono e insalubres de los campamentos migrantes en la frontera.
Lo que el funcionario hizo fue dirigirse básicamente a los migrantes. Les dijo que, a partir de ese momento, cambiaban las condiciones. Si se presentaban en persona a la frontera a solicitar asilo, serÃan rechazados. El TÃtulo 42 fue reemplazado por el TÃtulo 8, un procedimiento en que los migrantes tienen que mostrar pruebas y evidencias de las razones por las que piden asilo y, solo si amerita, se les concede entrevista.
Pero además, los migrantes sólo pueden presentar sus pruebas a través de una aplicación de móviles, les dijo, y si lo que acreditan tiene bases suficientes, a través de esa misma aplicación se les dará la fecha y hora para que concreten una entrevista con las autoridades.
El funcionario latino advirtió que quienes quieran cruzar la frontera sin permiso para entregarse y pedir asilo pueden ser rechazados, y en caso de insistir, pueden incluso ir a prisión hasta dos años y luego ser deportados.
Las medidas que anunció Núñez-Neto, sin responder a grupos de interés, redujeron de inmediato la migración a través de la frontera. Más aún, cuando una organización demandó a la administración por no apegarse al procedimiento de permitir que los migrantes cruzaran y se rindieran ante oficiales para pedir asilo, el funcionario volvió a calmar las tendencias al confirmar que "nada ha cambiado".
"Biden está manejando bien la cuestión migratoria y el tema no es una amenaza para su reelección"
En una reciente conversación con The Hill, Núñez-Neto expresó el punto de vista que lo guÃa en su misión y cómo se siente en el cargo que le asignó Biden. "En estos dÃas en el mundo de la inmigración, en realidad no es un mal lugar para estar, cuando ambas partes están un poco molestas, porque significa que en realidad estás haciendo algo que está a medio camino", dijo.
"La migración a Estados Unidos es uno de esos temas donde los extremos del espectro polÃtico tienden a dominar el debate. Pero creo que la mayorÃa de los estadounidenses están en algún lugar en el medio", afirmó.
El subsecretario considera a la migración como vital para Estados Unidos, pero es consciente de que las presiones aumentan porque el Congreso no ha actualizado medidas desde la reforma a las leyes de migración de 1986, cuando el expresidente Ronald Reagan permitió que millones de indocumentados que ya vivÃan en el paÃs regularizaran su situación migratoria.
Por experiencia personal, Núñez-Neto sabe que hay oportunidades para muchos migrantes. Ha dicho que se ha "beneficiado de la voluntad de Estados Unidos de aceptar inmigrantes, y somos uno de los pocos paÃses del mundo donde alguien como yo, un inmigrante, puede terminar trabajando en este tipo de puestos en el gobierno".
En tres años EU expulsó a casi tres millones de personas migrantes bajo el TÃtulo 42
Blas Núñez-Neto llegó a Washington en 1983 al acompañar a su madre, entonces empleada de la embajada de Argentina en Washington. Como inmigrante reúne su cultura latina y ahora estadounidense, lo que le permite tener ese punto medio, encontrar el terreno común, y mantener la empatÃa.
"Cuando miras lo que pasa la gente para venir aquÃ, estas personas que nos encontramos en la frontera ahora que han cruzado la selva del Darién, si bajas y miras el Darién, no puedes créanse la cantidad de personas que están transitando por esa zona todos los dÃas, porque es muy remota".
"Son familias-apuntó-- con niños pequeños. Entonces, si está dispuesto a hacer eso, hay muy poco que podamos hacer en la frontera que impida que la gente venga si no les damos la esperanza de que hay una forma legal de venir aquÃ".
Please do not cut or paste our notes on the web, you have the possibility to redistribute them using our tools.