El revés que recibió de la Corte sobre el Plan B llevó a López Obrador a dar un giro: ahora afirma que sí es necesaria una reforma al Poder Judicial y enviará la iniciativa al Congreso al cierre de su sexenio. Para ello, será clave impulsar lo que llama el "plan C" que consiste en ganar la mayoría calificada en el recinto legislativo.

"En septiembre envío tres reformas, una es la del Poder Judicial para que el pueblo elija a los ministros", dijo durante su conferencia de este martes, al mencionar la decisión que la Suprema Corte de Justicia (SCJN) tomó el día de ayer: con nueve votos a favor y dos en contra invalidó la primera parte de la Reforma Electoral, argumentando "vicios y omisiones".

Si bien el presidente ha tenido claros desencuentros con la Corte, criticando que está al servicio de intereses creados e insistía en la necesidad de una reforma, hasta ahora aseguraba que ésta debía surgir de los propios ministros, pero dada la decisión de ayer, arremetió esta mañana: "No tienen remedio, está podrido el Poder Judicial".

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En ese sentido, López Obrador cambió de parecer sobre la reforma: "Ya me di cuenta de que hace falta. Es lo mismo que la elección de los consejeros del INE, magistrados del tribunal, que los elija el pueblo". Pero para eso, reconoce que serà necesario tener mayorìa calificada. 

Acusó que, con la decisión de ayer, las y los ministros de la Corte "le compusieron la plana" a los legisladores, que aprobaron dicha iniciativa. "En un acto de prepotencia y autoritarismo se atreven a cancelar la ley los ministros que están al servicio de una minoría rapaz", dijo.