Enrique Alfaro tuvo 25 minutos a solas con el Papa Francisco en la residencia de Santa Marta y tras la postal  que cristalizó el encuentro, el secretario del Sistema de Asistencia Social Estatal Alberto Esquer comenzó a instalar en diversos ámbitos que es un firme candidato a la sucesión de Alfaro en Jalisco.

Esquer dice haber logrado la reunión en Roma gracias a sus nexos con la curia católica tapatía, que a su vez tiene buena llegada al entorno papal. La realidad es que, según pudo conocer LPO, la reunión se gestionó a través de un empresario ligado a cuestiones educativas en México y que tiene peso en el programa papal de Scholas Occurrentes.

Esquer es una de las tres opciones con las que Alfaro quisiera tener alguna oportunidad de disputar su sucesión. Los otros dos son el alcalde de Tlajomulco Salvador Zamora y el senador Clemente Castañeda. 

Alfaro habría subido a Esquer a su viaje por Europa donde supuestamente promovió el turismo en Jalisco sin demasiado motivo profesional por lo que cual se consideró conveniente decir que él iba a organizar el encuentro en el Vaticano.

El principal problema para las ambiciones de Esquer es su rol en un escándalo de moches en la Cámara de Diputados, que sin duda saldría a relucir si fuera el aspirante de MC. Luego se agregan los inconvenientes compartidos con Castañeda y Zamora: deberían pedir el voto por un gobierno estatal fuertemente desprestigiado y partir desde una base de conocimiento muy baja.