Borish Johnson sufrió este miércoles una nueva (y doble) derrota. El Parlamento británico aprobó finalmente una ley que impide la salida sin acuerdo de Reino Unido de la Unión Europea el próximo 31 de octubre y rechazó los planes del primer ministro de convocar elecciones anticipadas para acabar con el bloqueo que vive el país.

La intensa jornada parlamentaria comenzó en la Cámara de los Comunes con la aprobación con 327 votos a favor y 299 de una ley -que ahora tiene que pasar por la Cámara de los Lores- que impide que se lleve a cabo un Brexit duro. También obliga a Johnson a solicitar una prórroga del Brexit a la UE si antes del 19 de octubre no hay un acuerdo con sus socios europeos.

Tras la votación, Johnson propuso una convocatoria de elecciones generales para el próximo 15 de octubre al considerar que el país debe decidir si tiene que ser el líder de la oposición o él mismo quien vaya a Bruselas a negociar. Además, criticó que dicha ley supone una "rendición" ante Bruselas y limita el margen de negociación de Londres.

Pero el Parlamentó también tumbó su plan de convocar elecciones. Al menos de momento. Algunos críticos prefieren aplazar dicha cita hasta que se apruebe definitivamente la ley con la que evitar un Brexit agresivo. La líder del Partido Liberal Demócrata, Jo Swinson, aseguró tras la votación que su formación "no puede dejar que Boris Johnson utilice unas elecciones para llevar al país a un peligroso Brexit sin acuerdo que no apoyan ni la ciudadanía ni sus representantes".

La situación política en Reino Unido ha dado un vuelco después de que el martes el primer ministro perdiera la mayoría en el Parlamento cuando uno de sus diputados conservadores decidió cambiarse al grupo de los liberal-democrátas en señal de protesta por los planes de Johnson de salir de la UE sin acuerdo. 

Las discrepancias por el Brexit ya provocaron que Theresa May dimitiera de su cargo como primera ministra al no llegar a un acuerdo para llevar a cabo la salida de Reino Unido de la UE.