El candidato ultraderechista, Jair Bolsonaro, lanzó una velada amenaza de golpe militar si no es electo presidente de Brasil en las elecciones de 7 de Octubre. "Yo, por lo que veo en las calles, no acepto un resultado de las elecciones diferente de mi elección", aseguró este viernes en el programa televisivo Brasil Urgente. 

Entrevistado desde la camilla del hospital donde se recupera tras un ataque sufrido el 6 de septiembre, el candidato de derecha acusó al Partido de los Trabajadores (PT) del ex presidente Lula da Silva -que postula a Fernando Haddad-, de conspirar para manipular las elecciones.

"El PT solo gana mediante fraude", señaló el capitán de la reserva del Ejército Brasileño, que tiene a varios generales entre los asesores más cercanos a Bolsonaro. Actualmente, el candidato ultraderechista se mantiene en primer lugar en las encuestas pero estancado: En el sondeo de Datafolha, publicado este viernes, obtiene un 28 por ciento de la intención de voto en primera vuelta, frente a un 22 por ciento de Haddad. Sin embargo, el derechista figura con un rechazo de 46 puntos, previendo una derrota en el ballotage.

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Las declaraciones de Bolsonaro provocaron el inmediato repudio de todo el arco político brasileño y este sábado detonaron protestas en todo el país lideradas por mujeres, bajo el lema: "#EleNao", que significa en portugues "él no". Impresionantes movilizaciones se vieron en San pablo y Río de Janeiro, en un movimiento que alcanzó repercusión mundial y recibió el apoyo de figuras como Maddona y Cher.

En una situación polarizada al extremo, el clima político se terminó de calentar ese sábado cuando se supo que la Corte Suprema prohibió al diario Folha entrevistar a Lula, que permanece preso hace meses y se le prohibió ser candidato. El caso fue calificado por el diario -que es muy crítico del ex presidente- como un acto de censura previa.

Bolsonaro tiene una larga trayectoria de ataques y discriminación de mujeres. A la ex ministra de Derechos Humanos y actual diputada del PT María do Rosario llegó a decirle: "Me llamaste violador, y te dije que no te violaría porque no lo merecés". Después procuró aclarar su frase: "Ella no merece ser violada porque es muy mala y muy fea. No me gusta. Jamás la violaría. No soy un violador, pero si lo fuera no la violaría porque no lo merece".

En 2017 la diputada ya logró una condena judicial contra Bolsonaro por declaraciones de 2014, cuando el militar dijo que "algunas mujeres merecen ser violadas". 

Bolsonaro, quien no ha podido hacer proselitismo ni participar en debates presidenciales desde que fue apuñalado en el abdomen, dijo que intentará retomar la campaña el 12 de octubre, cinco días después de la primera vuelta.