Las declaraciones de Jorge Ferraresi que reveló ayer LPO generaron revuelo en el entorno de Axel Kicillof quien convocó inmediatamente al intendente a una reunión en La Plata.
El intendente de Avellaneda planteó un escenario de ruptura en el peronismo bonaerense para 2025 y llamó a construir un armado político alternativo que trabaje por la candidatura presidencial de Kicillof y que, en las próximas legislativas, juegue apartado de La Cámpora.
Sus declaraciones ocurrieron el sábado en Lanús -un distrito gobernado por La Cámpora- durante un plenario de su agrupación La Eva Perón.
El video del discurso de Ferraresi, publicado por LPO, encendió las alarmas en Casa de Gobierno y Kicillof convocó a la Mesa de Ensenada, un grupo de intendentes y ministros que rompieron con el kirchnerismo en la campaña del año pasado para encolumnarse detrás del gobernador.
Ferraresi propone romper con el peronismo y armar algo nuevo con Kicillof
Además de Ferraresi, llegaron a La Plata los intendentes Andrés Watson (Florencio Varela) y Fernando Espinoza (La Matanza).
Por parte de gobierno, están Gabriel Katopodis (Infraestructura), Carlos Bianco (Ministro de Gobierno) y Cristina Álvarez Rodríguez (jefa de Asesores). Por el lado de los ministros, estuvieron Carlos Bianco (Gobierno), Andrés Larroque (Desarrollo), Gabriel Katopodis (Infraestructura) y la jefa de Asesores, Cristina Álvarez Rodríguez.
La reunión transcurrió en total hermetismo. Voceros del gobernador negaron el encuentro, aunque lo confirmaron ministros e intendentes que participaron de la cumbre de urgencia.
En Casa de Gobierno buscan tomar distancia de las palabras de Ferraresi. Creen que el intendente de Avellaneda lo usa para tensionar con Máximo en la pelea que tiene por el PJ bonaerense.
En tanto, en el peronismo bonaerense creen que el intendente de Avellaneda "sobreactúa kicillofismo" sólo para tensionar con Máximo. Ferraresi creyó tener asegurado un lugar en la Legislatura pero estalló cuando le dijeron que efectivamente una banca del Senado sería para Avellaneda, pero quedaría para Emmanuel González Santalla, uno de los jefes de La Cámpora.
Por eso, las palabras de Ferraresi terminan dejando a Kicillof en un lugar incómodo. El gobernador intenta surfear las profundas diferencias que tiene con Máximo Kirchner. Esa tensión entre Kicillof y el líder de La Cámpora surgieron durante el armado electoral del año pasado en la provincia.
Por caso, Ferraresi apuntó a lo que fue el cierre de las listas seccionales en las que Máximo se quedó con gran parte de los lugares. "Axel no tiene un solo diputado ni un senador provincial. Es gobernador. Es imposible", se quejó el sábado.
Ferraresi mantiene a diario una frenética agenda de reuniones que difunde en sus redes sociales. Por su despacho en Avellaneda desfilan todos los desencantados con Máximo y Cristina Kichner.
Ayer se reunió con buena parte de lo que fue el gobierno de Daniel Scioli en la provincia. En la foto se puede ver a los ex ministros Alberto Pérez (jefe de Gabinete), Cacho Álvarez (Desarrollo Social), Oscar Cuartango (Trabajo), Nora De Lucía (Educación) y Pablo Navarro (Niñez y Adolescencia). También está Manino Iriart, un ex diputado provincial de Mar del Plata, muy cercano al ahora secretario de Turismo, Ambiente y Deportes del gobierno de Javier Milei.
"Es tiempo de construir un peronismo solidario. Que le de soluciones reales a las necesidades de un pueblo que sufre las políticas de ajuste del gobierno nacional", dice el texto que acompaña la foto de Ferraresi con los ex ministros de Scioli. Quizás una señal de que sus ex funcionarios no lo acompañan en su aventura en el gobierno libertario.
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