Axel Kicillof, Sergio Berni y el intendente de San Nicolás, Manuel Passaglia, mantuvieron un tenso cruce de opiniones en público, algo que pocas veces se vio en la provincia. Todo ocurrió durante una conferencia de prensa en ese distrito del norte de la provincia al que el Gobernador y su ministro de Seguridad habían llegado a San Nicolás para entregar 14 patrulleros.

Primero un poco de contexto: San Nicolás es -junto con Zárate- uno de los distritos con mayor cantidad de electores de la Segunda Sección electoral. Esos dos distritos son claves para el proyecto político de Berni que a pesar de su altísimo nivel de conocimiento, no logra plasmar poder territorial en el norte de la provincia. Por eso la visita tenía para el ministro un componente especial.

Pero además, Passaglia es un intendente consolidado dentro de la alianza Juntos que tiene el poder territorial en la sección para poner un freno al ministro.

La polémica surgió cuando Berni explicó a los periodistas que el gobierno provincial había llegado a San Nicolás para "reemplazar toda esta chatarra que nos dejó el gobierno de María Eugenia Vidal".

Cuando le tocó su turno, Passaglia evitó la confrontación directa pero dijo que su distrito cuenta con unos 50 patrulleros. "Esperamos que nos sigan acompañando para poder renovar toda la flota que se necesita", dijo el intendente y Berni lo interrumpió con fuerza. "Perdón, 43 están fuera de servicio y son chatarra. En funcionamiento, San Nicolás tiene apenas 12 vehículos", dijo.

Los intendentes del PRO vuelven a la carga por el control de la Policía Local

Passaglia buscó bajar la tensión y dijo que son más de 12 vehículos y explicó que contaba también con los patrulleros de la Policía Local.

Lo curioso fue que pese a su rol institucional, fue el propio Kicillof quien se metió en la discusión -siempre delante de los periodistas- para increpar a Passaglia. "Nosotros no te vamos a renovar los vehículos de la Policía Local", le dijo y dejó atónito a Passaglia. No es común que un Gobernador increpe así a un intendente en público.

Berni buscó encauzar el diálogo. "Estamos confundiendo las cosas, hay 50 vehículos que están apilados unos arriba de otros que no tienen ninguna capacidad de funcionar y que en los últimos seis años dejaron de estar en servicio", dijo el ministro.

Rápido de reflejos, el intendente volvió sobre lo que había dicho Kicillof. "La Policía Local depende de la provincia de Buenos Aires, depende del ministro y del Gobernador". Berni se dio cuenta que eso dejaba descolocado a Kicillof e interrumpió a los gritos a Passaglia: "Si claro, por eso te mandamos la plata para que lo mantengas".

Ahí aparece una confusión de parte de Kicillof que podría haber entendido que Passaglia estaba contando como patrulleros a las patrullas municipales. Autos sin blindaje que muchas veces tienen el ploteo del municipio y que se usan agentes municipales como refuerzo y sin portación de armas de fuego.

Otra cosa es la Policía Local. Una fuerza creada por Daniel Scioli para su campaña presidencial en una alianza con los intendentes. Durante la gestión de Vidal y en lo que va de gestión de Kicillof, los efectivos de esa fuerza fueron disminuyendo toda vez que pasaron a ser parte de la rama tradicional de la Policía de la provincia. Uno de los problemas de la Policía Local es su falta de escalafón, es decir la imposibilidad de lograr ascensos a lo largo de la carrera policial.

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Pero volviendo a la discusión, Passaglia insistía en que San Nicolás cuenta con unos 50 policías y apura una chicana: "Eso no es una discusión ideológica", dice.

Berni buscó interrumpir, pero el intendente logró retener el discurso. "Dejame hablar, habló yo y después hablas vos", le dijo al ministro y siguió: "Tenemos unos 50 vehículos entre Policía Local y Policía bonaerense. Las dos fuerzas dependen del Gobernador y del ministro".

Berni estaba visiblemente molesto. "La Policía Local tiene una ley, esa ley es muy clara respecto de cual es la responsabilidad de los intendentes no solo en mantener los patrulleros con la plata que giramos todos los meses, sino además generar políticas de seguridad", dijo el ministro y agregó que esa fuerza se creó en apenas tres meses y que se esta trabajando en una nueva ley.

La cuestión de la Seguridad es un tema caliente en el norte de la provincia, el pago chico de Berni. En los últimos días Cristian Ritondo y Diego Santilli recorrieron Zárate con una agenda enfocada en esa problemática. En las últimas horas, la concejal de Juntos, Victoria Semería, aseguró que hace más de ocho años que Cáffaro no compra ningún patrullero, ni deja subir personal policial a las patrullas locales.

Además, denunció que el intendente Osvaldo Cáffaro (Frente de Todos) destina 60.000 pesos mensuales para ocho patrulleros, lo que significa dos litros de nafta por patrullero por día.

La pelea por la Policía Local

Como trasfondo de este cruce aparece la presión sobre Berni para que los intendentes tengan mayor poder sobre la Policía Local. LPO había adelantado que los intendentes del PRO iniciaron una nueva avanzada para tener control sobre esa fuerza en sus distritos.

Néstor Grindetti (Lanús) salió a reclamar el traspaso de esa fuerza a la órbita de los municipios, mientras que legisladores que responden a Julio Garro presentaron un proyecto en la Legislatura.

Se trata de un viejo reclamo de los intendentes al gobierno provincial. Piden mayor autonomía, la descentralización de la policía y un mayor poder de decisión a los municipios.

Al pedido de los intendentes del PRO se sumó Mariano Cascallares, diputado provincial y mandamás de Almirante Brown. "Junto con otros intendentes de nuestro espacio creemos que una policía con referencia local, con un trabajo de aproximación que trabaje en la prevención de los delitos con dependencia local, puede ser una muy buena herramienta para un flagelo que es complejo", dijo.