Francisco Berlín, el ex chofer de Patricia que quedó a cargo de Seguridad Deportiva, tuvo un mal debut. En la vuelta del fútbol argentino, 300 barras de River se agarraron con facas y palos a 500 metros del Estadio Monumental.

Los golden boys de Patricia coparon el ministerio de Seguridad y se quedan con puestos clave

El nombramiento de Berlín generó ruido por su perfil: el joven no tiene ningún antecedente en materia de seguridad. En una entrevista reconoció que en su vida fue "poco a la cancha" y que nunca trabajó "con temas específicos de barras", pero cree que podrá suplir su falta de expertise por su "interés en el fútbol".

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Cuando le preguntaron si su falta de experiencia en una cuestión tan sensible no podía traerle problemas, Berlín se comparó con Scaloni, que antes de asumir en la Selección no había dirigido profesionalmente. Y en tres años se convirtió en campeón del mundo.

El sábado la barra disidente de River organizó un banderazo en lo que fue una abierta provocación hacia la barra oficial. Pero Berlín no se dio por enterado.

Al otro día, horas antes de que River debutara de local en la Copa de la Liga, se produjo el enfrentamiento que terminó con la detención de 30 barras, entre ellos Alejandro Medina, también conocido como Ale de Budge, líder de los disidentes. Además, la policía secuestró palos, piedras y armas blancas.

A pesar del paso en falso, desde el Ministerio de Seguridad que conduce Patricia, salieron a publicitar los operativos del programa Tribuna Segura, a cargo de Berlín, y festejaron que lograron aplicarle el derecho de admisión a 47 personas.