Horacio Rodríguez Larreta logró romperle a Patricia Bullrich la fórmula presidencial que trabajaba con el radical Alfredo Cornejo, que tuvo que volver a Mendoza por temor a perder el distrito que gobierna la UCR desde 2015.

En la provincia cuyana el PJ está en manos del kirchnerismo y no tiene ningún candidato competitivo. La principal amenaza para los radicales es Omar de Marchi, diputado nacional del PRO y armador de Larreta.

En las encuestas, De Marchi mide más que cualquier candidato de la UCR que no sea Cornejo. El ex titular del partido centenario se ve obligado a competir por la gobernación y dejó de viajar a Mendoza sólo los fines de semana luego de instalarse durante años en Buenos Aires.

Ahora está durante la semana en la provincia cuyana y viaja los jueves para la Capital. "Cornejo fracasó en su aventura nacional", dijeron a LPO en Mendoza.

Omar de Marchi

LPOJuan Casas

Si bien todavía no anunció su candidatura, está pronto a hacerlo. El gobernador Rodolfo Suárez, su delfín, anunció en las últimas horas que las primarias serán en junio y las elecciones generales en septiembre. Pero la fecha clave para los radicales es en abril, 60 días antes de las PASO, cuando se constituyan los frentes.

Las provincias díscolas no acatan el llamado a la unidad de Juntos y pueden perder cinco provincias que creían ganadas 

Cornejo presiona a la cúpula de Juntos por el Cambio para que obligue a De Marchi a competir dentro del mismo frente, pero el diputado del PRO prefiere ir por afuera ya que de ese modo sumaría otros partidos chicos que no lo apoyarían dentro del sello de Juntos.

Patricia avaló el pedido de Cornejo para presionar a De Marchi con "sanciones" de la Mesa Nacional de Juntos, pero el ex Partido Demócrata tiene el apoyo de Larreta y de Mauricio Macri para sostener su candidatura como sea. En el larretismo creen que estirar la incertidumbre hasta el final les dará mayor margen de negociación con la UCR y obligará a Cornejo a mostrarse en un terreno de inseguridades.