En el Gobierno entraron en alerta por la crisis del transporte que se avecina por el ajuste de Luis Caputo y la falta de diálogo del secretario del área, Franco Moggetta, con los gremios y empresarios.

Mientras en los pasillos del piso 12 los funcionarios de la Secretaría de Transporte de la Nación festejaban la caída de Gabriel Bermúdez del municipio de Córdoba por denuncias de acoso sexual, miles de pasajeros de los servicios urbanos de todo el país seguían penando para poder viajar, en la crisis más importante de ese servicio esencial en muchísimos años.

Como explicó LPO, el intendente de Córdoba, Daniel Passerini, echó a Bermúdez, pieza clave del entramado de poder del peronismo cordobés, hoy no exento de internas entre funcionarios y ex funcionarios de esa provincia, donde no se terminan de acomodar las piezas políticas del Schiaretismo y el gobernador Martín Llaryora.

A "los exiliados libertarios" como llaman en esa provincia a los ex funcionarios que recalaron en Nación, debe agregarse que el propio gobernador Llaryora, dice en privado que esas designaciones no representan ningún acuerdo político ni económico con la provincia.

En cada medición del gobierno la palabra transporte aparece asociada a ajuste, conflicto y crisis y nunca a cambios, reformas o soluciones. Los problemas generados con la Tarjeta SUBE fueron un ejemplo transcurridos noventa días de gobierno.

Franco Mogetta, uno de los "exiliados" al mando de la Secretaría de Transporte, está en una situación crítica. Hasta hace unos meses era la voz del reclamo de las provincias por la ampliación de los fondos para el financiamiento del transporte, y su primera su medida apenas llegó a su nuevo despacho fue la quita de los subsidios de Nación a esas jurisdicciones.

"Milei es libertario con GPS: en el interior ajusta y en el Conurbano es estatista y subsidiario", dicen en Rosario, en donde el boleto se irá a 1000 pesos en las próximas semanas.

Un escándalo de acoso de un funcionario clave complica al intendente de Córdoba

El Comité Federal de Transporte (COFETRA) que reúne a todos los ministros y secretarios de transporte de las provincias criticó fuertemente esta decisión. En el primer encuentro anual a fines de febrero sentaron posición en defensa del Fondo Compensador del Interior.

Los puntos centrales del reclamo de COFETRA a Nación son la disminución del Régimen de Subsidios a las empresas prestatarias de los servicios públicos de autotransporte de pasajeros y la consecuente eliminación del Fondo Compensador. "Esta intempestiva decisión del gobierno nacional, después de haber afirmado públicamente que se terminaría con la inequidad que sufre el interior con respecto al AMBA, en la asignación de recursos nacionales, es la culminación del proceso de deterioro que venimos denunciando", dijeron en el Comité.

"Milei es libertario con GPS: en el interior ajusta y en el Conurbano es estatista y subsidiario", dicen en Rosario, en donde el boleto se irá a 1000 pesos en las próximas semanas.

Los representantes provinciales indican que el 85% de los recursos económicos nacionales de transporte se destinan a la Ciudad Autónoma y al Área Metropolitana de Buenos Aires, mientras que el otro 15% se reparte en todas las ciudades del interior del país. Cualquier política que se tome debe considerar el impacto en el conurbano bonaerense, donde las estadísticas actuales marcan una caída entre frecuencias y servicios cercana al 15%.

En la reciente reunión de Gobernadores en Casa Rosada el reclamo de los gobernadores por la restitución Fondo Compensador del Transporte fue unánime con la voz de Axel Kiciloff a la cabeza.

Por el lado del AMBA las cosas también asoman muy complicadas. Las diversas Cámaras empresarias de transporte urbano y el gremio sectorial, la UTA, no tienen todo el diálogo ni los acuerdos que quisieran. Temen que Mogetta y su equipo no reciban el respaldo necesario frente a Luis Caputo para exigir más presupuesto.

El sistema de transporte en AMBA está desfinanciado, se han reducido frecuencias y pasajeros. El boleto de colectivo está muy lejos de lograr un equilibrio económico, señalan los dueños de las empresas. "Si piensan que con un ajuste de tarifas van a equilibrar el sistema se equivocan", se quejan los empresarios.

Gremios y empresarios no sólo dudan del respaldo político del equipo de Mogetta, les preocupa la capacidad técnica y administrativa para llevar adelante un proceso de reformas y ajuste demasiado grande.

Las mismas preguntas se hacen las empresas de transporte de larga distancia. Saben que hay en elaboración un proyecto de DNU estableciendo una desregulación casi total del sistema interjurisdiccional cuyo borrador fue redactado por algún consultor que no conoce el sistema. La UTA ya habría tomado nota de este proyecto que implicaría modificaciones a las nóminas de trabajadores de las empresas. Hasta la semana pasada no había sido convocada.

En el sector están al tanto de que la Secretaría de Transporte propicia la designación como Subdirectora de la CNRT de Mariana Isaurralde, actualmente Delegada del gremio ATE.

Durante la gestión de Alberto Fernández, Isaurralde manejó parte el vínculo del Ministerio de Transporte con el concesionario de la Terminal Retiro, Néstor Otero, a través de su designación como veedora (Resolución 54 del 2020). También se desempeñó en la CNRT en el área de Fiscalización acompañando a un hombre de ATE y el Movimiento Evita, Alejandro Rusconi entre los años 2007 al 2012.