Presidentes de seccionales y convencionales de todo el país le dieron a Santiago Peña hasta agosto, cuando cumpla su primer año de gestión, para acceder a espacios dentro del gobierno, en base a una promesa de campaña incumplida. De no ser así, amenazan al cartismo con una eventual derrota electoral en las municipales de 2026, repitiendo lo ocurrido en 2018 con la victoria de Mario Abdo Benítez.

Tras siete meses de gobierno, Peña no consigue esquivar las presiones de los dirigentes de base, que señalan al gabinete técnico del presidente, liderado por Lea Giménez y Carlos Fernández Valdovinos, quienes cumplen la función de filtro y, hoy por hoy, son los deciden quiénes entran y quiénes salen de los cargos.

Santi enfrenta una rebelión interna del cartismo por la falta de espacios en el gobierno 

Ese malestar latente, que sigue subiendo de temperatura entre la dirigencia, se pudo sentir en la última convención colorada donde, a diferencia de la ovación dada por los convencionales a Horacio Cartes y a Pedro Alliana, el presidente se tuvo que conformar con un tímido recibimiento que no pasó desapercibido en la jornada.

Sin embargo, la frialdad de los convencionales hacia Peña se exteriorizó a través de los comentarios del actual concejal y convencional de la capital, Miguel Sosa, que llamó a sus pares "a no tener miedo de pedir cargos a los ministros, porque gracias a ellos las actuales autoridades se encuentran ubicadas en el poder".

Santiago Peña, Horacio Cartes y Pedro Alliana en la última convención de la ANR. 

Presidencia de la República

Semanas antes, Peña lo había desautorizado a pedir cargos y ordenó que todo nombramiento o contrato pasara por las manos de Lea para su aprobación, lo que enervó a la dirigencia. A continuación, Sosa perdió su cuota de poder en la administración de Óscar "Nenecho" Rodríguez: le fueron retiradas todas las direcciones que controlaba y el cupo de contrato que contaba para su equipo, entrando al freezer hasta nuevo aviso.

En la antesala de la convención colorada, Cartes escuchará a los convencionales que piden cargos en el gobierno

La tarea de Lea en el gabinete de Peña es observada y criticada a la distancia por referentes de los distintos movimientos internos de la ANR. "Lea esta para trancar el pedido de los dirigentes. Pero ella nombra en cargos importantes a sus íntimos compañeros de facultad y amigos. Después se dedica a bloquear a todo dirigente de base", comentó a LPO un reconocido dirigente de la seccional 24 de capital.

Según indicaron a este medio, el director financiero del Ministerio de Obras Públicas (MOPC) Gustavo Garcete y la actual viceministra de Capital Humano y Gestión Organizacional del Ministerio de Economía y Finanzas, Andrea Picaso, lograron acceder a sus cargos gracias a la bendición de la jefa de gabinete. Todos ellos se conocieron cuando cumplían funciones en la dirección de la Red Bancaria de la ex cartera de Hacienda.

Los dirigentes de base, sobre todo los de Asunción, recurren a Turi Capello, secretario político de la Presidencia, que tiene experiencia en el manejo de las bases coloradas a nivel nacional

Los dirigentes de base, sobre todo los de Asunción, recurren a Turi Capello, secretario político de la Presidencia, que tiene experiencia en el manejo de las bases coloradas a nivel nacional. Cappello y Raúl Latorre son los responsables de la victoria en capital en las últimas elecciones que consagraron a Nenecho. Ahora es el elegido por gran parte de la dirigencia colorada para asumir la distribución de los cupos políticos de todos los movimientos de la ANR.

De no hacer un giro de timón. el comando político de Honor Colorado podría enfrentarse al destino electoral que le valió la derrota a Cartes en 2018, cuando Abdo ganó la candidatura presidencial. Algunos convencionales recuerdan incluso la suerte del exintendente Arnaldo Samaniego a manos de Mario Ferreiro, que obtuvo una diferencia de 114 mil votos. 

El mensaje de la dirigencia es contundente, es decir, se utilizará la estructura y dinero del cartismo para hacer recordar sobre quiénes recae el triunfo del oficialismo en las urnas. Para Peña, esta amenaza es difícil de conjugar con su estrategia de no inflar la planilla de funcionarios y respaldarse en su círculo de confianza, en el que Lea y Valdovinos ocupan un lugar clave.