En su primer día como jefe de Gabinete, Jorge Capitanich buscó mostrar un cambio contundente en el perfil de la gestión y arrancó su trabajo con una conferencia de prensa a primera hora de la mañana, repitiendo una práctica que acostumbraba en su anterior gestión como jefe de ministros.

Pero además del diálogo con la prensa, Capitanich trató de mostrarse activo en todos los temas de gestión, haciendo énfasis en las cuestiones económicas. "Vamos a cumplir objetivos y metas del Gobierno, no vamos a hacer anuncios grandilocuentes", respondió ante la consulta sobre las metas de inflación.

En ese sentido, el chaqueño dijo que uno de los objetivos de su gestión es "exportar más, que haya más inversiones en el sector privado y público" para "incrementar el flujo de divisas y reservas". Al respecto, indicó que el objetivo del Gobierno es la de "generar todas las condiciones de certidumbre para que los argentinos tengan una mejor calidad de vida".

Capitanich también hizo referencia a la sangría de reservas que sufre el Banco Central y adelantó que los dólares "no se utilizarán para la compra de bienes suntuarios". "Es mucho más importante tener insumos especiales para la cadena productiva que para comprar autos lujosos que satisfacen sólo a alguna persona en particular", explicó y agregó que "en todo caso, se tendrá que pagar más por ello".

La importación de autos es una de las grandes distorsiones del sistema cambiario actual. El Gobierno ya había tomado nota y la semana pasada anunció un aumento de los controles para las compras de vehículos importados de más de 350 mil pesos, con más presión sobre los compradores. En lo que va del año, la importación de autos creció un 33%, alcanzando los U$S5.200 millones. Sólo en septiembre el crecimiento fue de 48%.

Profundizando sobre la cuestión cambiaria, Capitanich indicó que es partidario de continuar con una política de "tipo de cambio con flotación administrada" y señaló que buscará ser "muy coherente desde lo fiscal, lo monetario y lo cambiario", dando a entender que se buscará ponerle un freno a la sangría de dólares.

Además, el jefe de Gabinete afirmó que el objetivo es alcanzar un crecimiento económico del 6,2 por ciento en el año 2014, además de "la conservación del trabajo y la preservación del poder adquisitivo del salario". Sobre esto último, dijo hará una convocatoria "amplia y democrática" a todos los actores de la cadena de valor para lograr "rentabilidad a los productores y precios justos a los consumidores".

Respecto a temas políticos, Capitanich sostuvo que estará abierto a dialogar con los dirigentes de la oposición "cuando lo requieran" y se mostró dispuesto a "discutir todos los temas" y se ofreció a ir a dar los informes de gestión al Congreso. En ese sentido, indicó que estará "contacto con todos los jefes de bloques".

Finalmente, el jefe de Gabinete anunció que convocará a todos los gobernadores para abrir "una agenda bilateral que incluya temas desde la seguridad pública hasta el desarrollo productivo".