Finalmente, tal como lo adelantó este lunes La Política Online, el paro nacional organizado por la CGT Azopardo de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli logró paralizar la compra/venta de hacienda y la actividad portuaria en todo el país.

En este contexto, desde bien temprano en la mañana miembros del Sindicato de Camioneros que conduce Pablo Moyano bloquearon el ingreso de camiones al Mercado de Liniers impidiendo el normal desarrollo de los negocios.

De esta forma, en la plaza de venta de hacienda más importante del país ingresaron unos 1400 animales en 39 camiones que lograron entrar a la madrugada. Sin embargo, sólo se pudieron vender 83 animales versus 7034 cabezas el martes de la semana pasada.

Según pudo saber LPO, las 83 cabezas fueron comercializadas por una firma consignataria que tenía previsto de antemano un remate especial. En tanto, el resto de los animales no pudieron ser vendidos porque personal de caballo se adhirió al paro.

“En el Mercado de Liniers se vivió una jornada desoladora porque muchos de los trabajadores de la plaza se plegaron a la medida; prácticamente no hubo negocios por el paro”, comentó un consignatario que estuvo presente en el barrio porteño de Mataderos.

Por su parte, las principales terminales portuarias también experimentaron una caída notable. En los puertos de la zona de influencia de Rosario ingresaron 289 camiones, de los cuales 205 correspondieron al puerto de Noble y 55 al puerto de Terminal 6.

El tema es que la mayor parte de las terminales no registraron actividad en el transcurso de la jornada producto del paro. Para tener una idea del volumen, el martes de la semana pasada habían ingresado 1884 camiones en los puertos del Up River.

En tanto, según publica valorsoja.com, en los puertos de Necochea (Quequén) y Bahía Blanca no se registró ingreso alguno de camiones, mientras que el martes pasado en las terminales de ambas zonas portuarias habían ingresado 536 vehículos.

El fuerte impacto en los puertos se debe a que la Unión de Recibidores de Granos de la República Argentina (Urgara), liderada por Alfredo Palacio, y la Federación de Estibadores Portuarios Argentinos, que lidera Juan Corvalán, adhirieron al paro.

Floja participación de productores

“El malestar del campo es de más de un 80 por ciento de repudio; las economías regionales y la lechería están en quiebra”. Tal afirmación le corresponde al presidente de Federación Agraria Argentina (FAA) Eduardo Buzzi.

El paro contó con la participación directa FAA y la adhesión oficial de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Sociedad Rural Argentina (SRA), al tiempo que Coninagro hizo una especie de apoyo extraoficial a través de sus máximos dirigentes.

Sin embargo, -y en contra de lo que esperaban de antemano los principales dirigentes rurales- la jornada de protesta no contó en el interior del país con una gran cantidad de productores en las rutas ni en las ciudades.

LPO pudo relevar manifestaciones en las principales localidades productivas de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y La Pampa. Pero ninguna de estas protestas contó con una presencia masiva de productores.

Esto porque, según cuentan algunas fuentes del sector consultadas, la única entidad rural que decidió apoyar activamente el paro fue FAA, al tiempo que el resto de las entidades del sector solamente se adhirieron.

Además, tal como adelantó este medio, hasta en la propia entidad federada generó internas el paro y la alianza de Buzzi y Moyano. Por este motivo, el propio Alfredo de Angeli aseguró que adhiere a los reclamos, pero no se moviliza.

El mercado operó con normalidad

Un dato que llamó la atención en el sector agropecuario es que, pese al paro, tanto el recinto de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) y el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) operaron con casi total normalidad.

De hecho, por la soja con descarga inmediata en Rosario se pagó 1860 $/tonelada (unos 30 $/tonelada más que el cierre anterior). Los precios del trigo (230 u$s/tonelada), el maíz (195 u$s/tonelada) y el girasol (1590 $/tonelada) también operaron con alzas.

En el Matba, la única modificación que hubo fue que las operaciones debieron llevarse a cabo únicamente en el mercado electrónico de 11 a 17. Sin embargo, esa pequeña traba no fue impedimento para que se realicen una gran cantidad de negocios a futuro.