Tomó clases de oratoria, se muestra en los medios y de a poco va levantando su perfil. Conversa periódicamente con los intendentes del Conurbano y estrechó relaciones con buena parte de la CGT. A eso le sumó una defensa a ultranza de la presidenta Cristina Kirchner y todo con un objetivo claro: presidir el PJ de la provincia de Buenos Aires.

El jefe comunal de La Matanza, Fernando Espinoza, -de él se trata- quiere emular a Alberto Balestrini y, según pudo saber La Política Online por el momento su operativo para recoger apoyos marcha más que bien, aunque, claro, todavía falta la palabra de la Presidenta.

Tal como señaló este medio en su momento, Espinoza forjó una especie de acuerdo con el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez. De hecho, el ex ministro estuvo el miércoles en el distrito festejando el Día de la Lealtad peronista.

La sorpresa de la tarde fue la reaparición del rector de la Universidad Nacional de La Matanza (Unlam), Daniel Martínez, quien había criticado a Cristina por sus ambiguos dichos sobre los alumnos de esa casa de estudios en su paso por Harvard. Justamente, Espinoza fue uno de los que primero salió a cruzar a Martínez defender a la Presidenta.

“Recompusieron relaciones, ambos saben que se necesitan”, contó a LPO una fuente cercana a ambos.

Claro que para que Espinoza pueda acceder a la presidencia del PJ, no alcanza con Domínguez y Martínez. Por eso, el intendente aceleró conversaciones con jefes comunales del Conurbano que no ven con malos ojos que el matancero conduzca al peronismo de la Provincia.

Es más, los intendentes prefieren que Espinoza acceda a la titularidad del PJ- hoy en manos de Cristina Álvarez Rodríguez- antes que algún dirigente de La Cámpora se haga con el cargo. En definitiva, ven en la maniobra una forma de cosechar poder real más allá de lo simbólico del puesto.

En la Provincia tampoco rechazan de plano al intendente. Es más, el gobernador Daniel Scioli lo tiene catalogado como un “moderado”, no tan apegado al ultrakirchnerismo.

Además, Espinoza ya recogió también el respaldo de parte de la CGT por parte del metalúrgico y diputado nacional Carlos Gdanski. “El Ruso”, tal como se lo conoce al matancero le aseguró a Espinoza el apoyo de toda la estructura sindical del distrito.

El apoyo de Cristina

Con ese panorama, Espinoza comenzó a levantar, de a poco, su perfil. Por ejemplo, ahora se lo ve habitualmente en medios de comunicación cuando años ha siempre rehusaba al contacto con la prensa. De hecho, en la actualidad su equipo le organiza reuniones con periodistas locales y provinciales.

Pero también muchos notaron un cambio de estilo en la forma de expresarse tanto en la prensa como en los actos. Según contaron algunas fuentes este cambio es producto de algunos cursos de oratoria que viene tomando Espinoza.

De todos modos, Espinoza sabe que para cumplir con su objetivo necesita el visto bueno de la Casa Rosada. Varios dirigentes matanceros señalan que, en ese sentido, no es casual el respaldo a ultranza a Cristina.

Meses atrás el intendente fue uno de los primeros en instalar la idea de una re-reelección para la Primera Mandataria y siempre repite que La Matanza será la primera línea de fuego para una reforma de la Constitución.

Esta semana, en una reunión con intendentes, Espinoza fue uno de los intendentes que le pidió a Cristina que busque un tercer mandato.