El ministro de Salud, Juan Manzur, tuvo que salir esta mañana a aclarar que no había firmado la resolución que agilizaba el proceso de los hospitales para realizar abortos legales. “Fue un error de comunicación”, dijeron fuentes oficiales del organismo, pero en la cartera sanitaria ya hay sospechas de que este “error” encubre una maniobra del Gobierno para “tantear el humor social sobre este tema”.

Es que, pese a que Cristina Kirchner aseguró en varias oportunidades que no impulsarán un proyecto de ley para despenalizar el aborto, hay sectores del oficialismo que no terminan de creer esas palabras y miran al marido de la mandataria recordando que quien impulsó la ley de matrimonio gay fue él más que ella.

El martes, el diario cercano al kirchnerismo, Página 12, publicó una nota en la que se informaba que el titular de Salud había dado rango de resolución ministerial a la Guía Técnica para la Atención Integral de los Abortos No Punibles", por lo que permitía a los médicos interrumpir el embarazo en caso de violación sin necesidad de recurrir a la Justicia, sólo hacía falta una declaración jurada de la víctima. Esta medida fue confirmada al matutino –y luego a distintas radios y programas de televisión- por la coordinadora del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, Paula Ferro. “Frente a la ausencia de normativas provinciales, esta guía debe ser una referencia. El Estado nacional está marcando así un piso de acceso a derechos. Se trata de señalar un protocolo de atención frente a los casos que ya están contemplados en la ley”, explicó cada vez que se le preguntó sobre ello.

La resolución supuestamente firmada por Manzur el 12 de julio estuvo colgada de la página oficial del organismo durante un día entero, bajo el número 1182/10 y fue fogoneado por la secretaría de Comunicación del propio Ministerio. Hoy, por supuesto, la noticia repercutió en las tapas de los matutinos. El diario La Nación, la presentó como una medida polémica que lindaría la legalización del aborto, mientras que Clarín la mostró como un avance para evitar demoras en la práctica de abortos contemplados por la ley.

El tema cobró tal grado de importancia en la agenda mediática que hasta las diputadas kirchneristas Diana Conti y Juliana Di Tullio defendieron la medida. Y Cecilia Merchán de Libres del Sur, anticipó que impulsará un proyecto para despenalizar el aborto ni bien termine el receso invernal.

“Fue un error de Ferro que luego el Ministerio divulgó creyéndolo cierto”, explicaron en desde la cartera sanitaria. En un breve comunicado de prensa lo dejaron claro: “El ministerio de Salud de la Nación aclara que su titular, Juan Luis Manzur, no ha firmado resolución alguna respecto de la Guía Técnica para la Atención Integral de los Abortos No Punibles".

La resolución está escrita y lista para hacerse efectiva, sólo le falta la firma de Manzur para convertirse en una medida ministerial. En el organismo aseguran que el tucumano no quiere meterse aún con el tema de aborto, tan ríspido en la sociedad argentina. "Más claro que no firmar la resolución, no puede ser el mensaje", afirman.

Sin embargo, algunos ven con ojos suspicaces que esta aclaración haya salido un día más tarde de la primera publicación y que se permitiera dar rienda suelta al tema en los medios y aseguran que “se trata de una jugada del Gobierno para tantear el humor social sobre este tema y ver qué posiciones toman los medios, líderes de opinión y políticos”.

Mientras el kirchnerismo mide la opinión de los argentinos, y con la aclaración de que la Guía de 2010 no fue firmado, sigue vigente la de 2007.

La diferencia es que ésta establece que los casos que una paciente solicita que se le realice un aborto porque fue violada, los médicos deben solicitar a la mujer "constancia de la denuncia judicial o policial de la existencia de la violación". La de 2010, añadía que, si no había habido denuncia, alcanzaba con una "declaración jurada".