La integración del Ente Nacional de Comunicación (Enacom) es motivo de una nueva disputa entre los gobernadores del peronismo y La Cámpora, que deben definir uno de los tres directores reservados para el Congreso.

Los otros dos serán para la segunda y la tercera minoría, que son Cambiemos y el Frente Renovador. Pero el decreto de Macri les da un lugar de testigo a los legisladores, porque los otros 4 integrantes del Directorio serán definidos por el Gobierno de turno.

Pero el peronismo está hambriento de puestos de poder y cada butaca disponible desata una interna. Sobre todo si aparecen figuras polémicas como el jujeño Guillermo Jenefes, ex senador y ex vicegobernador de Jujuy, durante el último mandato de Eduardo Fellner.

Jenefes, dueño de un multimedios del norte del país, es recordado por haber criticado la ley de medios durante el recordado debate parlamentario de hace 6 años que culminó con su sanción.

Su nombre fue acercado por gobernadores como el salteño Juan Manuel Urtubey, quien viene chocando duro con La Cámpora por el reparto de cargos. En diciembre, fue uno de los promotores de Fellner al frente de la Auditoría General de la Nación, pero Cristina Kirchner, aún en la Casa Rosada, impuso a Ricardo Echegaray.

Tras largos seis meses del Gobierno de Mauricio Macri, la historia se repite en el organismo creado por Macri para reemplazar la Aftic y el Afsca, dos emblemas del kirchnerismo.

La Cámpora no quiere saber nada con Jenefes y propone a Graciana Peñafort, la experta en comunicación que asesoró a Gabriel Mariotto en la redacción e la ley de medios.

Quienes circulaban por la Casa Rosada en esos años aseguran que la hizo ella en diálogo permanente con Néstor Kirchner.

Los camporistas encontraron de aliada a la senadora jujeña Liliana Fellner, integrante de la bicameral de comunicación audiovisual, encargada de definir los directores. Al parecer, la relación de Jenefes con su hermano no terminó bien.

El Frente para la Victoria-PJ tiene 8 de los 16 miembros, tres de ellos cristinistas puros: los diputados Eduardo Seminara, Marcos Cleri y el senador Ruperto Godoy.

Pero en el resto también hay otros más proclives a escuchar a la ex presidenta que a los líderes provinciales, como la diputada Liliana Mazure y los senadores Norma Durango (Chubút) y Sigrid Kunath, también tironeada por el gobernador Gustavo Bordet.

Por ahora, con estos números la furia de Fellner fue suficiente para congelar a Jenefes, aunque aún resta una negociación para cerrar a Peñafort.

La bicameral se constituyó el martes y la jujeña, que la presidió el año pasado, será secretaria.

El presidente es el diputado radical Miguel Bazze y el vice su par massista Alejandro Grandinetti, tras una ardua discusión con el kirchnerismo, que demoró en dar quórum, quizá para mostrar que se sesionará sólo si ellos lo desean.

Los radicales se pelearán con el PRO por nombrar al director, pero tienen sólo tres de los seis miembros de la bicameral. Tendrán que consensuar.