El ex director de asuntos internacionales de Petrobras, Nestor Cerveró, declaró ante la fiscalía de Brasil que los ex ministros Julio de Vido y Roberto Dromi operaron para que Electroingeniería  se quedase con las acciones de Transener, tal como había revelado un mes atrás el lobbista brasileño Fernando Baiano.

Cerveró agregó ahora un nuevo testimonio que salpica al ex ministro de Planificación kirchnerista y su antecesor menemista -asesor en las sombras de De Vido- en la compleja trama de corrupción que pone a jaque a Petrobras y a la estructura política brasileña.

De acuerdo a la versión de Cerveró, publicada por Estadao, De Vido en principio entorpeció la venta de Transener a un fondo americano para luego presionar para que las acciones de esta transportadora eléctrica pasaran a manos argentinas.

El presidente Kirchner ejercía mucha presión para que Petrobrás vendiese las acciones que tenía en Transener, recuerda el arrepentido Cerveró.

El ex director de Petrobras declaró ante la fiscalía que tanto él como Baiano recibieron 300.000 dólares en coimas en 2006 por esta operación y que lamentablemente “en la Argentina quedó la mayor parte de las coimas en este negocio”.

Cerveró afirmó que desde el inicio del gobierno de Néstor Kirchner, el presidente argentino ejercía “mucha presión” para que Petrobras vendiese las acciones que tenía de Transener, un 50% de la empresa.

“Siguiendo las instrucciones, cerramos el negocio con la empresa americana para la venta de Transener, aprobada (en principio) por De Vido. El acuerdo con la empresa americana y el ministro ya era un hecho, pero intervino el amigo de Electroingeniería y el ministro deshizo el acuerdo”, relató Cerveró.

El amigo de Electroingeniería al que hace referencia es Jorge Luz, a quien califican como "un lobbysta brasileño representante de Electroingeniería”, la empresa de Gerardo Ferreyra y Osvaldo Acosta, ligados al ex secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, a quien el gobierno de Macri acaba de dar luz verde para que continúen con el meganegocio de las represas de Santa Cruz.

Los dueños de Electroingeniería, Gerardo Ferreyra y Osvaldo Acosta.

Cerveró confirmó, como ya había anticipado Bahiano, que Dromi, Luz y De Vido lanzaron entonces una estrategia para que el gobierno nacional no apruebe la venta de Transener a la empresa norteamericana.

El arrepentido reveló incluso que De Vido lo convocó "personalmente a su oficina” y determinó que la venta fuese hecha a Electroingeniería.

“Vale destacar que mis reuniones con el ministro De Vido eran solamente entre nosotros dos”, agregó y aseguró que el ministro kirchnerista “despachó un decreto prohibiendo que la venta fuese para la empresa americana”.

Cerveró y Baiano citaron también un almuerzo en el hotel Four Season, de Buenos Aires, en el que se habrían terminado de anudar la venta y las coimas. El ex director de Petrobras afirmó que el encuentro fue intermediado por Dromi y Jorge Luz.

“Hubo un almuerzo en el hotel Four Seasons intermediado por el abogado Dromi y Jorge Luz, del que participó F. Soares (Fernando Baiano) y el dueño de Electroingeniería, amigo personal de De Vido, cuando quedó acordada el interés de Electroingeniería en Transener, que terminó concretándose”, recordó.

En el relato de Baiano, el almuerzo fue una forma de De Vido de agradecer “por el empeño de Cerveró en la solución del problema”.

Finalmente en 2007 Petrobras vendió su participación accionaria en Transener -bajo la sociedad Citelec- por u$s 54 millones. Los compradores fueron Enarsa y Electroingeniería, tal como habían planificado Kirchner y De Vido.

Nestor Cerveró y Fernando Baiano fueron condenados por corrupción y lavado de dinero en distintos procesos enmarcados en el escándalo conocido como Lava Jato y se acogieron a la figura de arrepentidos -que existe en Brasil para casos de corrupción- de manera de reducir sus condenas a cambio de testificar.