Ricardo Alfonsín perdió los estribos durante la reunión de Comisión de Relaciones Exteriores que debatió los acuerdos con China y le propinó severos gritos al kirchnerista Carlos Heller.

Como acostumbra, el banquero se dirigió a la oposición leyendo fragmentos de una editorial publicada ayer en La Nación por Joaquín Morales Solá, pero cuando estaba por terminar escuchó los aullidos de Alfonsín.

“¡¿Por qué no se lo vas a decir a Morales Solá?!”, le inquirió exaltadísimo el ex candidato presidencial, apuntándolo con el dedo desde su silla, en diagonal a Heller.

El diputado de Nuevo Encuentro creía no ser cierto lo que veía. “Se está comportando como un mal educado”, le dijo en vos suave. “¡Es que me tienen cansado, toda la tarde acusándonos!”, se despachó Alfonsín, siempre fuera de micrófono. “Sea bueno, no sea malo”, intentó pararlo el economista.

Tanta fue su ira que hasta Carlos Kunkel, ubicado enfrente, le indicó a sus pares no responder para evitar que la sesión se desmadre. Guillermo Carmona, a cargo de la reunión, pidió calma. Alfonsín aceptó, se echó atrás y quedó mascullando bronca.