Axel Kicillof aceptó ceder en algunas de las demandas de la oposición y logró que la Legislatura bonaerense aprobara una autorización de endeudamiento por USD 500 millones.

Como adelantó LPO el miércoles, la negociación comenzó a encaminarse cuando el gobierno se comprometió a un Fondo Covid de $ 3.000 millones para los intendentes y la activación de dos mesas de trabajo. Una para reactivar un Fondo de Infraestructura Municipal de $ 2.000 millones que, en rigor, se trata de un monto que se había acordado a fines de diciembre y que el gobierno nunca ejecutó.

La otra mesa de trabajo discutirá la deuda que tiene el gobierno central con los municipios. Según explicó el titular de la comisión de Presupuesto, Juan Pablo De Jesús (Frente de Todos), se va a encauzar un trabajo para determinar cuál es la deuda exigible y una vez consolidado el número se generará un cronograma de cancelaciones para lo que resta del ejercicio 2020.

Kicillof cede $ 5.000 millones a los intendentes y empieza a destrabarse el endeudamiento

El proyecto -aprobado primero en Diputados y luego en el Senado- prevé la autorización de toma de deuda por un monto de hasta USD 500 millones y $ 28.000 millones ($ 20 mil millones para emitir bonos para proveedores y $ 8 mil millones en Letras del Tesoro provincial).

"Al igual que ahora, en la etapa pospandemia va a ser muy importante el rol del Estado como motor de la reactivación, acompañando al sector productivo", aseguró el presidente de Diputados, Federico Otermín.

La semana pasada no se había podido llegar a un acuerdo. Cambiemos se había negado a votar el endeudamiento y la primera línea del Ejecutivo salió a acusar a los legisladores de la oposición de "poner palos en la rueda". Uno de los más duros en el gobierno, el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, dijo que "se trató de una actitud absolutamente penosa y mezquina de la oposición".

Fuerte malestar en el gabinete de Kicillof por la negativa de Cambiemos de aprobar el endeudamiento

Por momentos pareció que el Ejecutivo y la oposición iban a llegar a un escándalo como el de diciembre pasado cuando Cambiemos se negó a votar un paquete impositivo. Esa ve, el propio Kicillof convocó a una conferencia de prensa en la que se mostró irritado y hasta acusó a los legisladores de "extorsionadores".

Sin embargo, esta vez el Gobernador se mantuvo al margen de la polémica y evitó salir a confrontar directamente con la oposición. Fueron Bianco, Pablo López (Hacienda) y Teresa García (Gobierno) los ministros que cumplieron ese rol.

Desde Cambiemos defendieron a María Eugenia Vidal que aparecía como el blanco de las críticas. "Ni Maria Eugenia, ni nadie quiso bloquear el endeudamiento. Solo queríamos saber en qué se iban a gastar los recursos que se estaban pidiendo", dijo el diputado Alex Campbell (Cambiemos).

Kicillof no tiene un escenario fácil en la Legislatura. En Diputados necesita de Cambiemos para llegar a la mayoría especial y en el Senado la situación es aún más complicada toda vez que es el bloque opositor quien tiene la mayoría.

Rubén Eslaiman.

Aglaplata

El problema para el gobierno es que la bancada de Cambiemos no muestras fisuras a pesar de la derrota electoral y una difícil reconversión a ocupar un rol opositor. "Acá no hay decisiones aisladas. La decisión la tomamos como fuerza política. No escondemos nada y lo que pedimos es ver las obras y ayudar a los intendentes", explicaban desde el bloque.

Había un punto clave para la oposición. Durante todos estos días, el ministro de Hacienda de la provincia se negaba a mostrar a los legisladores el listado de obras afectadas al endeudamiento solicitado.

Tras aprobar el endeudamiento en la provincia, desde Cambiemos celebraron la voluntad de diálogo del gobierno

Recién este jueves, el Ejecutivo aceptó incluir esas obras en el proyecto. "Si desde Cambiemos no nos plantábamos y no pedíamos el destino de las obras, el texto no iba a detallar ninguna. Y ahora celebramos que haya fondos afectado a viviendas y al sistema sanitario", dijo el diputado de Zárate, Matías Ranzini.

Otro punto refería a los $13.000 millones que Kicillof giró a los intendentes durante la crisis sanitaria. Según los convenios firmados con el Gobernador, los jefes municipales debían comenzar a devolver esos montos esta semana. Lo que acordaron oficialistas y opositores es que se pague ese dinero en 18 cuotas a partir de enero de 2021. Esto le da a los intendentes más tiempo para reponer las alicaídas cuentas municipales comprometidas durante la pandemia.

Desde el massismo festejaron ese auxilio financiero a los intendentes. "Esta Ley es la ayuda que los municipios estaban esperando, municipios e intendentes que aguardaban el oxigeno financiero que venía atado a esta Ley de Financiamiento. Ahora, Kicillof podrá hacerle frente a los compromisos ineludibles", aseguró el diputado Rubén Eslaiman.