Diego Kravetz es hoy una pieza central en el gobierno de Néstor Grindetti en Lanús y uno de los primeros que podría dar el salto a las filas de Alberto Fernández en caso de que el intendente de Cambiemos pierda el municipio contra el peronista Edgardo Depetri.

Las versiones de su posible salto después de octubre se basan en el rol que ocupa Kravetz -garantizarle a Grindetti el voto "peronista no K"- y se apoyan en la larga amistad que tiene con el candidato del Frente de Todos. 

Kravetz respondía a Alberto cuando era jefe de bloque del kirchnerismo en la Ciudad, un cargo que ocupó hasta 2011. Años más tarde, se cobijó en Cambiemos de la mano de Grindetti.

La municipalidad de Lanús lanzó un spot que alienta el corte de boleta

Kravetz admite su buena relación con Alberto pero asegura que incluso si Grindetti pierda buscará seguir trabajando a su lado para recuperar el municipio. Como contó LPO, el intendente está haciendo una campaña de carácter "vecinalista" -en sintonía con sus pares del Conurbano- despegada por completo de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal con el objetivo de lograr el corte de boleta necesario para retener el municipio.

Lo cierto es que Grindetti tiene muy buena relación con peronistas como Martín Insaurralde y Mariano Cascallares, dos de los intendentes más cercanos a Alberto. Además, decidió apoyarse en figuras como Kravetz para "peronizar" su perfil y reclutar en los barrios a dirigentes del PJ no kirchnerista. También busca rescatar a algunos dolidos con Depetri, que compitió en una interna áspera contra tres cuatro candidatos. 

En rigor, en el peronismo de Lanús ya muchos especulan con que si Grindetti logra retener el municipio será uno de los primeros en juntarse con el candidato de Todos. En este escenario, Kravetz abrió en campaña nuevos locales partidarios, como uno en Monte Chingolo que aparece cargado de insignias peronistas y hace alusión a la "conducción" peronista de Grindetti, sin rastros de la estética característica de Cambiemos.