La reapertura del mercado cambiario tras los feriados de Semana Santa no trajo buenas noticias para el Gobierno. Los intentos por tratar de transmitir tranquilidad con los anuncios del miércoles pasado no parecen dar resultados positivos y este lunes el dólar volvía a saltar cerca de setenta centavos para llegar a $43,69 en el promedio minorista.

En la primera parte de la jornada cambiaria fue donde se vio el mayor incremento con un pico de $42,77 en el segmento mayorista que parecía una consecuencia de la jornada negra del jueves pasado, cuando a pesar del feriado local hubo una fuerte suba del riesgo país hasta los 850 puntos y un desplome de hasta 8 por ciento de las acciones argentinas que cotizan en Wall Street.

Paralelamente, ese clima pesimista sobre la economía argentina se mantenía este lunes con un nuevo salto del riesgo país, que llegaba a 858 puntos básicos para luego descender a 842. Se trata de la cifra más alta durante la gestión de Mauricio Macri y a la que no se llegaba desde 2014 cuando la Argentina estaba al borde del default por el conflicto con los fondos buitre.

Los malos datos de los indicadores son resultado de un mayor pesimismo por el índice de inflación de marzo que se conoció el martes pasado, un escepticismo sobre las medidas económicas del Gobierno y también la incertidumbre política. Como contó LPO, en los mercados causó impacto la encuesta que muestra a Cristina Kirchner nueve puntos arriba de Macri en una hipotética segunda vuelta.  

Al igual que en este caso, la suba del dólar terminó atenuándose luego de las dos subastas de 30 millones dólares del Banco Central y del repunte de 75 puntos básicos de la tasa de interés. La misma tuvo un promedio de corte de 67,87%, a partir de la cual se colocaron 197.831 millones en Leliq.

De esta manera, el tipo de cambio terminó operando a $42,48 en el mercado mayorista y a $43,69 en el promedio de las pizarras minoristas.