El ministro de Gobierno bonaerense Joaquín de la Torre retrocedió sobre sus pasos y aseguró que Rogelio Frigerio "hace muy bien su trabajo". Molesto por la cantidad de recursos asignados a Buenos Aires en el presupuesto, el funcionario había dicho que "no era justo que el dinero generado" por la Provincia "lo reparta" el Ministro del Interior.

La puja entre el gobierno nacional y el mayor distrito electoral del país recrudeció con la discusión del presupuesto. Después de lograr una compensación por lo que recibía del estado por el "Fondo del Conurbano" que ascendió a casi 65 mil millones de pesos para 2017, las perspectivas para 2019 resultan preocupantes para María Eugenia Vidal.

En las últimas semanas, los ministros bonaerenses Federico Salvai y Hernán Lacunza mantuvieron negociaciones frenéticas para acordar con Nación incluir una modificación en el presupuesto que permita actualizar por inflación el Fondo del Conurbano. El problema es que dinero que recibirá la Provincia para este año y para el próximo está indexado a los cálculos inflacionarios de diciembre pasado que según las optimistas predicciones de Federico Sturzenegger y Lucas Llach iba a alcanzar el 10% este año y el 5% en 2019.

En un año eleccionario la gobernadora deberá tomar a cargo los subsidios que pagaba el estado nacional por transporte, electricidad y agua que suman casi 25 mil millones de pesos. Esa fue una de las condiciones que pusieron los gobernadores peronistas para acompañar el presupuesto. De hecho la discusión comenzó mucho antes de que la Casa Rosada enviara la "Ley de leyes" al Congreso.

"Es un error político dejar a la provincia con menos dinero del que corresponde", dijo de la Torre al diario La Capital de Mar del Plata.

Sin embargo para intentar recomponer la relación con Frigerio, quien está encargado de las negociaciones con todos los mandatarios provinciales, el intendente de San Miguel en uso de licencia cambió su discurso.

"El problema no es el ministro del interior. El problema es un sistema que lo pone a él a repartir todos los años los impuestos. Y ahí es donde la provincia de Buenos Aires queda muy golpeada, porque es la que más genera", explicó el funcionario.