Un sólido crecimiento económico continúa impulsando a la administración de Donald Trump, que logra así seguir sorteando los escándalos e investigaciones que cercan al republicano. Un Trump eufórico anunció esta mañana en los jardines de la Casa Blanca que en el segundo trimestre la economía norteamericana creció un explosivo 4,1% del PBI, una marca que la economía de Estados Unidos no veía hacia un largo tiempo.

El anuncio se produce además a tres meses de las elecciones legislativas más importantes de los últimos años, que en alguna medida definirán si el magnate tiene chances serias de ser reelecto . Trump celebró los números con una espectacular conferencia de prensa en la que destacó además que las cifras de desempleo llevan meses en bajos históricos.

"Hemos logrado un volteo económico de proporciones históricas. Cuando llegué al cargo, 1.5 millones menos americanos estaban trabajando que 8 años antes", dijo Trump junto al vicepresidente Mike Pence. El mandatario indicó que se habían recuperado cientos de miles de empleos en manufactura desde su llegada a la Casa Blanca.

"Una vez mas somos la envidia económica del mundo entero. Cuando me encuentro con líderes de otros países lo primero que dicen -invariablemente- es 'Señor presidente, qué gusto conocerlo, felicidades por su economía. Está liderando al mundo entero'. lo dicen casi todas y cada una de las vez. Estados Unidos es respetado otra vez, está ganando otra vez, porque finalmente estamos poniendo a Estados Unidos".

La inversión privada en negocios ha ascendido de 1.8 por ciento el año ANTERIOR a que yo tomara el cargo a 9.4 por ciento este año -- eso significa ¡TRABAJOS, TRABAJOS, TRABAJOS!

Más adelante el presidente ofreció una entrevista telefónica inesperada al comentarista Sean Hannity. Al aire, Trump aseguró que si logran recortar el déficit comercial de EU por la mitad, "podríamos ver un crecimiento de 3 o 4 puntos más". Es decir, un crecimiento de 9% este año, cifra mucho más agresiva que la que maneja la Fed.

Medios y analistas como Bloomberg proyectan que es posible que no se repita un crecimiento tan dramático como el del segundo trimestre del años. El Wall Street Journal explicó que el crecimiento se dio en gran parte gracias a las exportaciones y atribuyó más de una cuarta parte de los 4.1 puntos a este rubro.

El economista Ian Shepherdson, analista en jefe de la consultora Pantheon Macroeconomics, alertó que el crecimiento del Q2 sería difícil de replicar en el futuro cercano. Las razones son que las exportaciones de soya se dispararon hacia finales de junio debido al temor de los aranceles; los importadores se prepararon y compraron en cantidades extraordinarias para evadir los impuestos que ya veían venir.

Otro de los posibles motivos del inusual crecimiento de la economía estadounidense fue que los consumidores gastaron los bonos que recibieron del recorte fiscal de diciembre. Se trata de bonos que difícilmente volverán a ocurrir . Los números sugieren que las empresas han usado los ahorros de los recortes no para elevar los salarios de sus empleados, sino para readquirir acciones y solidificar sus ganancias.

Como sea, los números de hoy llegan en un momento crítico para los republicanos, quienes se enfrentarán a unas elecciones de medio término en noviembre que ya pintan difíciles para ellos. Aún si el siguiente trimestre no presenta un crecimiento de la misma magnitud, Trump y su partido podrán seguir presumiendo una administración con una economía sólida y en crecimiento. Está por verse si será suficiente para mantener el control del Congreso.