La decisión de Mauricio Macri de avalar la construcción de la represa Portezuelo del Viento, en la provincia de Mendoza, desató la furia del gobernador de La Pampa, Carlos Verna, que venía trabando el proyecto, pero también provocó malestar en la UCR pampeana.

El presidente dictó ayer el laudo arbitral ante la controversia que se había generado en el seno del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (COIRCO) por la obra y, como era previsible después de las declaraciones de la semana pasada, favoreció a los intereses de Mendoza, donde gobierna su aliado radical Alfredo Cornejo.

Para calmar la previsible bronca de los pampeanos, el laudo ordenó la realización de un estudio de impacto ambiental en toda la cuenca del Río Colorado. "La adjudicación de la obra estará supeditada al resultado de esa evaluación", aclaró Presidencia. El relevamiento estará a cargo de la Universidad Nacional de La Plata y la del Litoral.

La Pampa se había opuesto a la construcción de la represa sobre el Río Grande al afirmar que afectará el caudal del Río Colorado y amenazará provocar sequías al reducir los cupos de agua en la cuenca, algo similar a lo que le sucedió con el río Atuel. Además, Verna había pedido a Macri que se aparte por su evidente posición favorable a la obra.

Apenas conocido el laudo, Verna anunció que recurrirá a la Corte Suprema para frenar la construcción de la represa. "Mendoza nos robó un río hace setenta años (el Atuel). Hoy, el presidente Macri nos está robando otro", indicó el gobernador en un comunicado.

"Esto representa una grave violación de los más elementales principios republicanos, ya que se convierte en una acción del Poder Ejecutivo Nacional que compromete la imparcialidad e independencia del presidente (...) Ha sobrepuesto por encima de las garantías constitucionales de las que todos los habitantes deben gozar, los intereses de una sociedad política concertada entre la Nación y Mendoza", disparó Verna.

El aval del Presidente a Portezuelo puede tomarse tanto como un guiño a Cornejo, actual presidente de la UCR y quien fue mencionado como un posible compañero de fórmula en 2019; así como un embate contra el peronista Verna, que es uno de los gobernadores de peor relación con la Casa Rosada.

Críticas radicales

Lo curioso es que mientras en Mendoza el gobierno radical está eufórico, en La Pampa la UCR se sumó a las críticas del peronista Verna contra Macri. 

"Este laudo de Macri no es parte del cambio. Nuestro presidente no debió intervenir en esto, no puede ser juez y parte", cuestionó el diputado nacional Daniel Kroneberger, quien definió la decisión presidencial como "una injusticia" y admitió sentir "indignación y frustración".

Por su parte, el presidente de la UCR pampeana, Hipólito Altolaguirre, aseguró le "sorprende" la decisión de Macri y lamentó que "parece que La Pampa no forma parte de la Argentina". "Esta obra es para beneficiar exclusivamente a Mendoza y a nadie más", agregó el radical, que defendió el papel de Verna en esta disputa.

El diputado provincial Abel Sabarots, también de la UCR, expresó su "repudio" a la decisión de Macri. "Es una injusticia para nuestra provincia, ya que no sólo hemos tenido enormes problemas hídricos y de crecimiento por falta del Río Atuel, ahora también corre peligro el caudal del Río Colorado", agregó.

La posición de los radicales contrasta claramente con la de sus socios locales del PRO. El principal referente del macrismo en La Pampa, el secretario de Deportes, Carlos MacAllister, mantiene el silencio, mientras que el diputado Martín Maquieyra pidió esperar el estudio de impacto ambiental, aunque retrucó algunas de las críticas de Verna.