Luego de semanas de tensiones por los recortes que busca aplicar el Gobierno sobre los fondos de los fideicomisos del Poder Judicial, la presidenta de la Corte Suprema, Norma Piña, aceptó este martes la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador para destinar dichos recursos a la reconstrucción de Acapulco tras el devastador paso del huracán Otis.

A través de una carta pública, la magistrada consideró que la propuesta hecha por el jefe de Estado durante su conferencia de prensa "representa una alternativa real" que le permitirá tanto al Poder Ejecutivo como el Judicial trabajar en "defensa de su población". "Trabajaremos en conjunto por la recuperación de las personas más afectadas, para devolverles el derecho al futuro que les fue suspendido y buscar asegurarles, en el menor tiempo posible, condiciones de igualdad para continuar con su proyecto de vida", manifestó Norma Piña.

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El acuerdo al que parecen haber llegado ambos representantes representa el primer acercamiento entre el Palacio Nacional y la Corte Suprema luego de semanas de discusiones y tensiones exacerbadas durante el último tiempo a raíz del proyecto oficialista para acabar con los fondos millonarios de los fideicomisos del Poder Judicial. A raíz de esto, la presidenta de la Corte adelantó que quedará a la espera de la respuesta oficialista para definir el "canal institucional para dialogar los términos con la finalidad de concretar la propuesta".

Hasta el momento, el Presidente no brindó mayores detalles sobe su propuesta para canalizar estos fondos hacia Guerrero, donde la población sufre las devastadoras consecuencias del huracán que arrasó con la ciudad de Acapulco. De todas maneras, se espera que, a partir de este principio de entendimiento con la Corte Suprema, haya avances en las próximas horas.

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Asimismo, Norma Piña manifestó que su gestión trabaja para "garantizar los derechos de todos los integrantes" del país y destacó que desde principio de año su equipo desarrolla "un proyecto de reingeniería" para garantizar dichos derechos y, al mismo tiempo, mejorar el uso y aprovechamiento de los recursos públicos "para el cumplimiento de otros fines sociales", como puede ser, ejemplificó, la crisis que sufre Acapulco.

Al mismo tiempo, este martes el presidente abandonó sus oficinas del Zócalo para dirigirse hacia Acapulco por segunda vez desde el paso del huracán. Parte de su gabinete ya se encuentra en las costas de Guerrero a raíz de la crisis humanitaria que se vive por la falta de agua, alimentos, combustible, electricidad y comunicaciones Se espera que el jefe de Estado coordine una serie de reuniones y supervise la respuesta que brinda el Estado.