Sumergido en la lucha por la instalación de la Reforma Educativa y con el profundo desgaste que le generó el confrontamiento con la CNTE, Aurelio Nuño fue perdiendo terreno en la carrera presidencial. Ahora, la coyuntura internacional puede jugar un chance a su favor.

Donald Trump y sus ataques hacia México volvieron a poner fuertemente en la mira a Luis Videgaray por el tema de la relación bilateral y a Osorio Chong con el siempre delicado tema de seguridad. Pero la persistencia en el discurso republicano antimigratorio toca también al secretario de Educación Pública.

Nuño apostará por mostrar un acompañamiento alrededor de los dreamers. Su oportunidad se lo dieron las universidades, cuando las cabezas de la UNAM y del IPN salieron a decir que no había ya capacidad para recibir a los migrantes que regresen por falta de presupuesto.

Si los de licenciatura incompleta, pongamos de tercer año o cuarto año, quisieran enrolarse en la universidad mexicana, pues serían poco más de 2 mil personas. Es una cifra manejable.

El mismo José Antonio Meade, a cargo de Hacienda, confirmó esta aseveración. "Yo creo que es correcto tanto lo que dice el rector de la UNAM como el director del Poli: si nosotros tuviéramos que enfrentar hoy un incremento de la demanda de matricula del 100% de los dreamers que están fuera, no tenemos capacidad presupuestal de acomodarla".

Nuño, en cambio, fue a contracorriente e intenta instalar que la repatriación de mexicanos al sistema educativo nacional "es manejable" en el sistema educativo que administra.

Cuartoscuro

Desde San Lázaro, uno de sus hombres de máxima confianza, Otto Granados, dijo: "Si los de licenciatura incompleta que estaban estudiando allá, pongamos van en tercer año o cuarto año y quisieran enrolarse en la universidad mexicana, pues estamos hablando de poco más de 2 mil personas. Es una cifra absolutamente manejable".

El subsecretario de Planeación, Evaluación y Coordinación de la SEP explicó que en el sector educativo hay 86 mil vacantes por lo que la SEP buscaría incorporar en plazas de docentes a los connacionales que tengan un alto nivel de inglés para que impartan la materia.

"Estamos hablando de un fenómeno que es manejable y creo que lo podemos hacer con bastante eficiencia, y, por supuesto, lo que hace esta iniciativa es ayudar a que ese proceso se lleve a cabo de manera más ordenada", insistió el funcionario.