Las elecciones de 2018 se acercan y cada jugador empieza a hacer su apuesta. Es el caso del influyente Héctor Serrano. Todos hablan de su ambición por suceder a Miguel Ángel Mancera, pero los caciques del PRD ya observan sus movimientos para conseguir un lugar en el Senado.

La alianza de la tribu ADN con Vanguardia Progresista se generó con objetivos comunes. Las dos corrientes necesitaban correr del mando a Nueva Izquierda para evitar que el "aliancismo" con el PAN siga creciendo, después de los éxitosos resultados en las últimas elecciones.

Serrano debía proteger los intereses de Mancera, pues la alianza con el PAN lo dejaría sin chances presidenciales. Héctor Bautista no quiere ceder con el blanquiazul en el Estado de México. Allí quiere imponer a Juan Zepeda.

La unidad de este nuevo bloque al interior del PRD ya se venía mostrando en las votaciones del CEN. Y quizás el punto más ilustrativo fue el giro de último momento de Bautista para apoyar a Alejandra Barrales en lugar de Pablo Gómez.

Como sea, fuentes del partido aseguraron a La Política Online que Serrano se apoyará en el peso de los consejeros de ADN para poder negociar su ingreso como candidato a senador. Su intención, por supuesto, es ocupar un lugar como plurinominal, pero también podría estar en la boleta del PRD por DF.