Para López Obrador, la manera de atender la demanda de despenalizar el aborto en todo el país sería por medio de una consulta ciudadana, como ha propuesto con otros temas sensibles durante este gobierno. El presidente defendió que esta decisión no debe quedar en el poder -ni en el político ni en el de la iglesia- sino en la ciudadanía, en especial, de las mujeres.

El triunfo de la denominada ola verde en Argentina avivó el debate en México. Para quienes apoyan esta postura abrió una posibilidad de que en el país se pudiera continuar esta ruta, la cual ya fue transitada por entidades como la Ciudad de México y Oaxaca.

No fue una batalla sencilla en el Senado argentino, donde la decisión tomó12 horas de debate, que al final se resolvió con la gestión del presidente Alberto Fernández y la promesa de correcciones en la reglamentación. Además, a la par que se aprobó la ley de 1000 días, abocada a proteger a la embarazadas y a los niños, ideada para acercar posiciones con la Iglesia Católica.

El Senado argentino aprobó la ley de legalización del aborto

Ante el furor que provocó tal resolución, visibilizado en las redes sociales, esta mañana de jueves se le cuestionó al presidente sobre el tema, quien señaló: "Es una decisión que tomaron en Argentina, nosotros hemos sostenido que es un tema que debe de consultar y en el cual deben de decidir libremente, en especial las mujeres y que no haya ninguna limitación", dijo.

En ese sentido, agregó que "lo mejor es consultar a ciudadanos y mujeres. Hay mecanismos para solicitar la consulte y puede ser vinculante, lo que lleva a que se modifiquen las leyes o no, dependiendo de la opinión de las mujeres".

Explicó que él no ve conveniente que sea una decisión desde arriba: "Aun existiendo una legitimación real, como lo es el poder legislativo, considero que, en estos casos, lo mejor es la aplicación de la democracia participativa". También dejó en claro que no debe ser un asunto "del gobierno, de los poderes o la Iglesia".