Andrés Manuel López Obrador fue uno de los críticos más férreos a la Reforma Energética, situación que habría cambiado en las últimas semanas, según confirmó su asesor económico Abel Hibert en el Foro LatinFinance, en donde expuso los principales pilares del proyecto del candidato de Morena.

Esta crítica explícita de López Obrador siempre se matizó entre sus asesores económicos, que decían que en realidad sólo se revisarían algunos de los contratos adjudicados en las rondas. Ayer, Alfonso Romo aseguró a Bloomberg que "AMLO ha revisado la mayoría de las licitaciones de petróleo adjudicadas a compañías privadas y llegó a la conclusión de que son beneficiosas para México".

Consultado por el reciente giro, Hibert explicó: "Ha habido un proceso de información hacia López Obrador para que se entienda que es una propuesta buena".

"Hemos estado evaluando la Reforma Energética y hemos visto que ha funcionado bastante bien. Los contratos que se han asignado han sido muy transparentes. El Estado mexicano ha aprendido a hacer estos procesos de asignaciones de recursos de la Nación", agregó el economista regio en uno de los paneles organizados por LPO y en diálogo con el editor de este medio, Andrés Wainstein.

Se le consultó por qué AMLO había sido tan crítico de estos proceso, incluso proponiendo consultas a la ciudadanía para revocarla o llevar el pleito cortes internacionales: "Hay que reconocer que la postura tradicional de la izquierda en este tema ha sido crítica. Es histórico en México. Es casi cultural. Si no fuera AMLO, y el candidato de izquierda fuera otro, tendría la misma postura".

Hibert reconoció que "Pemex no tiene la capacidad financiera ni tecnológica para llegar llegar a los pozos que se están licitando actualmente". Y aseguró que el líder tabasqueño ya sabe que la Reforma puede ayudar a revertir la caída en la producción petrolera.

Luego, en la mesa moderada por LPO, el asesor económico repitió las principales propuesta de AMLO: ajustar fuerte el gasto corriente del Gobierno para redirigirlo hacia la inversión pública, principalmente en infraestructura, para apuntalar el crecimiento sin la necesidad de tomar deuda ni de incrementar los impuestos.

Pero frente a una consulta del público, respecto a las obras del Nuevo Aeropuerto, sugirió que ese polémico tema también podría ser reconsiderado por López Obrador. "Es un caso similar al de la Reforma Energética: hay contratos que respetar", dijo.

Esta situación fue anticipada por LPO, quien meses atrás reveló que ante el blindaje financiero que logró Peña Nieto imponer al proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México era económicamente inviable suspenderlo. Y no sólo eso, si gana las elecciones AMLO recibiría el principal beneficio político por la obra ya que le tocaría a él inaugurarlo.

"Tendrá que evaluarlo en el caso de ganar las elecciones y llegar a la Presidencia, ver que sea la decisión más conveniente en costo beneficio. Pero sí sería muy costoso echarlo para atrás. Yo creo que es un proyecto que sí podría seguir", concluyó Hibert, dejando bastante claro lo que sucederá con el proyecto si López Obrador llega a la Presidencia.