Ayer, en un artículo firmado por la politóloga Frida Ghitis en The Washington Post, se informó que los presidentes de Estados Unidos y Rusia (Donald Trump y Vladimir Putin) pueden estar trabajando para apoyar la precampaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador, ya que México "se encuentra no sólo cerca de Estados Unidos, sino también a un clic de distancia de Rusia y su caldera de hackers".

En México, dice Ghitis, cada ataque Trump a los mexicanos, le favorece a López Obrador: "El candidato presidencial perenne vio su campaña encenderse con cada insulto de Trump". "Su esposa anunció recientemente que Ackerman se unirá al gabinete de López Obrador si gana. Y un anfitrión de un programa de RT incluso describió a Ackerman como 'nuestro hombre en México'", refiere el texto del rotativo estadounidense.

Hoy, Enrique Ochoa Reza admitió que sin indicios, ni elementos sobre el posible vínculo del gobierno de Rusia y la candidatura presidencial de López Obrador, aunque consideró que si ya lo han mencionado medios nacionales y extranjeros es un "foco rojo que está prendido y que debe ser investigado".

"Este tema debe ser revisado porque en México está prohibida la intervención de otros países o personas extranjeras en los procesos electorales", declaró Ochoa en entrevista para Radio Fórmula, donde además acusó al tabasqueño de contar con el apoyo del gobierno de presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.

"En estas elecciones", a las que calificó como las más importantes "de esta generación", el PRI ganará las nueve elecciones de gobernador que se realizarán este año y sostuvo que "lo ideal es que el señor López se vaya a su rancho [La Chingada] al concluir las precampañas".

"AMLO sigue siendo el mismo autoritario de siempre, es aterradora su propuesta de liberar delincuentes, endeudar a México lo que generaría crisis, desconfianza y desempleo", añadió.

Sobre el arribo del senador Javier Lozano a la precampaña de Meade, el líder nacional del PRI declaró que su partido tiene "las puertas y las ventanas abiertas".