"El Comité Ejecutivo Nacional de MORENA acordó que todas y todos nuestros candidatos que continúan en el ejercicio del cargo como legisladores federales o locales deben solicitar licencia a más tardar el 4 de abril, para enfocar todos sus esfuerzos a las actividades de campaña. De lo contrario se podrá solicitar a la Comisión Nacional de Elecciones que se valore la postulación en dicha candidatura".

Esto es parte de una misiva que Mario Delgado entregó a las oficinas de diputados federales en San Lázaro y a senadores en el recinto parlamentario de Reforma, como un ultimátum para que pidan licencia y se dediquen a una campaña que "requiere de la entrega completa al trabajo territorial desde abajo y casa por casa para materializar que el próximo 2 de junio".

"Todas las encuestas marcan una amplia ventaja de por lo menos 30 puntos en favor de nuestra candidata en la contienda presidencial e incluso una ventaja considerable en la intención del voto para el Congreso de la Unión. Sin embargo, esta situación no puede ser motivo para la autocomplacencia o triunfalismos desmedidos, es nuestra tarea llevar a las urnas este ánimo favorable a nuestra casa", insistió Delgado Carrillo a sus compañeros legisladores.

El contraste del optimismo del dirigente nacional de Morena, como lo confiaron a esta redacción alguno de los legisladores a los que llegó la poco amistosa solicitud. De acuerdo con los morenistas, fueron las recientes mediciones demoscópicas que llegaron al war room de Claudia Sheinbaum lo que llevó a Delgado a dar este manotazo.

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Tan sólo en la última encuesta al respecto de Massive Caller, empresa que trabaja para Xóchitl Gálvez, se anticipa cómo quedaría conformada la Cámara de Diputados, incluyendo plurinominales, tras la elección del próximo 2 de Junio: Morena-PT-Verde obtendrían 259 diputados (58.1%); mientras que PRI-PAN-PRD alcanzarían 216 (43.2%). Por su parte Movimiento Ciudadano llegaría simplemente a 25 congresistas (5%).

A la espera de nuevas mediciones -la de Massive Caller se realizó en marzo-, a nueve semanas de la elección, Delgado estaría echando toda la carne al asador y exigiría lo mismo de todo el partido y sus integrantes. Así se lo habría pedido también a Sebastián Ramírez, dirigente morenista en CDMX, uno de los flancos débiles en esta elección.

La ventaja para Sheinbaum Pardo podría achicarse, sin poner en riesgo una eventual victoria. Pero la misión de Morena, como se lo impuso el propio presidente López Obrador, está en el Plan C, una mayoría constitucional en ambas Cámaras que necesitaría de 86 senadores y de 334 diputados federales, además de una mayoría en los 32 de los Congresos estatales.

La misiva de Mario Delgado a los legisladores.

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