América Latina
Washington desplaza a AMLO y apuesta por Petro para la negociación de las elecciones en Venezuela
Colombia liderará una cumbre que buscará relanzar las negociaciones entre el chavismo y la oposición. El visto bueno de Biden. Fue primicia de LPO.

Luego de que las negociaciones de paz entre el gobierno chavista de Venezuela y la oposición que se realizaban en México sufrieran un estancamiento, este martes el presidente de Colombia, Gustavo Petro, buscará revitalizar la mesa de diálogo con una cumbre internacional de la que participarán casi 20 países y que buscará conformar un escenario regional capaz de incentivar a la búsqueda de una salida negociada a la crisis del país caribeño.

Durante el año pasado México albergó una mesa de diálogo entre las partes que estuvo representada, por el oficialismo, por el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez; y por la oposición, por Gerardo Blyde. La misma se estancó luego de que Cabo Verde extraditara a los Estados Unidos al empresario Alex Saab, a quien Washington acusa de ser testaferro del presidente Nicolás Maduro y a quien el chavismo califica como un "preso político". Desde entonces, las conversaciones no avanzaron y ahora Colombia busca recoger el guante y seguir adelante, como anticipó LPO en agosto del año pasado. 

Maduro quiere a Colombia como sede del diálogo con la oposición 

En este contexto, el colombiano Gustavo Petro buscará oxigenar el proceso que languidecía en México. Su administración está trabajando en este objetivo desde que asumió en agosto del año pasado. Desde entonces, logró la reapertura de la frontera con Venezuela en un acto conjunto con Maduro, se reunió con el líder chavista en más de una oportunidad y, durante su reciente gira por los Estados Unidos, recibió el visto bueno del presidente Joe Biden, quien respalda estas nuevas negociaciones desde las sombras a la espera de poder agilizar la llegada de petróleo caribeño a raíz de los problemas que genera en el mercado internacional la invasión de Rusia a Ucrania.

En diálogo con La Política Online, el politólogo y analista venezolano Piero Trepiccione aseguró que la cumbre de este martes será un intento para "alcanzar un relanzamiento de la mesa de México o generar otro mecanismo que relance el diálogo". "Esto puede ayudar para planear una hoja de ruta que podría ser volver a México con algunos cambios o iniciar un nuevo camino con otros actores", aseguró y adelantó que los temas principales a tratar serán el levantamiento de las sanciones en contra del país y la construcción de una vía electoral transparente y legítima de cara a las elecciones presidenciales estipuladas para 2024.

Esto puede ayudar para planear una hoja de ruta que podría ser volver a México con algunos cambios o iniciar un nuevo camino con otros actores.

Según Trepiccione, dos motivos principales incentivan la búsqueda de soluciones por parte de Colombia. La primera de ellas es lograr detener la migración venezolana que llega constantemente a Colombia en búsqueda de mejores condiciones de vida. Según distintas estimaciones, más de siete millones de personas abandonaron Venezuela durante los últimos años, de las cuales más de un millón permanece en Colombia. La segunda es económica ya que Bogotá busca reactivar los lazos económicos con su país vecino que a raíz de la crisis sufrieron una fuerte caída. A ello se le suma, además, las propias conversaciones de paz que la Casa de Nariño mantiene con las guerrillas, que encuentran refugio y protección en territorio venezolano.

Según pudo saber esta redacción, existe una gran expectativa entre las partes para poder acelerar acuerdos que alcancen una salida negociada a la crisis. Esto se basa en las buenas relaciones que Petro mantiene con Maduro ya que el líder chavista lo reconoce como un presidente cercano y progresista y por la positiva reunión que mantuvo el presidente con líderes de la oposición durante el último fin de semana, a la cual Gerardo Blyde calificó como "muy buena" y "productiva".

Maduro recibió al embajador de Petro y Colombia se perfila como sede del diálogo venezolano

En este contexto, también hay que tener en cuenta la reciente gira que Petro realizó por los Estados Unidos donde se reunión con Joe Biden, quien le manifestó su apoyo a esta cumbre a pesar de que Washington no participará de forma explícita. En diálogo con esta redacción, la analista venezolana Indira Urbaneja sostuvo que Washington "es parte del conflicto" a raíz de las sanciones que mantiene en contra del país, por lo cual su posicionamiento y visto bueno será fundamental para concretar acuerdos. "La Casa Blanca apoya estas conversaciones, por eso fue tan fácil realizar la convocatoria y sentar a las partes", agregó.

Un hecho demuestra la apuesta y el acompañamiento de Washington en esta nuevo mecanismo. En las próximas horas viajarán a Bogotá el asesor presidencial de EU especial para las Américas, Chris Dodd; el director principal del Consejo Nacional de Seguridad para el Hemisferio Occidental, Juan Gonzalez; y el viceconsejero de Seguridad Nacional, Jonathan Finer. La comitiva evidencia un involucramiento norteamericano que no existió durante la permanencia de la mesa de diálogo en territorio mexicano.

El calendario también promueve la concreción de acuerdos. Las partes venezolanas aspiran a una salida positiva porque el año que viene se deberían realizar elecciones presidenciales, a las cuales Maduro apunta llegar con el reconocimiento internacional que le podría dar este acuerdo y la oposición podría recibir las garantías de transparencia que exige desde hace años para participar en igualdad de condiciones. Además, en 2024 también habrá elecciones en Estados Unidos por lo cual se promueve un pacto antes de un posible regreso del Partido Republicano a la Casa Blanca.

La Casa Blanca apoya estas conversaciones, por eso fue tan fácil realizar la convocatoria y sentar a las partes.

El año pasado, México albergó la mesa de diálogo que buscaba una salida a la crisis. Este martes estará representado en Bogotá por el director general de Organismos y Mecanismos Regionales Americanos, Efraín Guadarrama Pérez. El estancamiento que sufrió su iniciativa, los buenos lazos que existen entre Petro y Maduro, las facilidades que le garantizan la geografía y el visto bueno de los Estados Unidos que parece relegar a Andrés Manuel López Obrador cambió la dinámica de un conflicto que sigue en la búsqueda de soluciones pacíficas y negociadas. 

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