La meta de que la refinación de crudo en el país esté al 100% no podrá ser concretada, pues Petróleos Mexicanos (Pemex) reconoció que la de Salina Cruz tiene un muy lento avance de apenas 10%, con lo que se prevé que sea hasta entrado el 2025 que pueda estar lista.

En el marco de su reporte financiero al primer trimestre del año, Reinaldo Wences, subdirector de evaluación y cumplimiento regulatorio de Pemex transformación, explicó que aún no se han terminado las obras en dos refinerías: Tula y Salina Cruz, tal como ya habían advertido especialistas a LPO.

En el caso de Tula aseguran que podrán concluir durante los tres primeros meses de 2024, hay que la construcción de la coquizadora está casi al 70%, sin embargo, el proyecto global que incluye plantas y servicios auxiliares está apenas al 50%.

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Sin embargo, la más rezagada es Salina Cruz en donde apenas arrancaron las obras y por lo tanto llevan tan solo un 10% de avance. "Terminaríamos ese proyecto en el segundo trimestre de 2025, aseguró el funcionario al ser cuestionado sobre el avance en refinación.

De acuerdo con el directivo de Pemex, explicó que actualmente Pemex se encuentra procesando alrededor de 923 mil barriles diarios, con días en que se reporta incluso arriba del millón y la expectativa es que, para todo el año el promedio ronde los 950 mil barriles, ese "brinco" se explicaría por las rehabilitaciones hechas en las refinerías, aseguró.

Para el gobierno, el plan de refinación es crucial para avanzar en su objetivo de soberanía energética. Esta mañana de jueves, el presidente López Obrador informó que hará un recorrido por Tula, Salamanca y Cadereyta.

En cuanto a Pemex se trata también de un plan estratégico para hacer frente a su abultada deuda que para el primer trimestre de este año se ubicó en poco más de 107 mil millones de dólares.

Vale recordar que ayer se confirmó que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público cortó las transferencias de capital a la petrolera, sin embargo, Pemex apuesta a que pueda negociar el que sigan los apoyos para el pago de impuestos a través de diferir el DUC, que es la utilidad que la petrolera entrega a la hacienda pública.

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Aunado a eso su director de finanzas, Carlos Cortez, explicó que analizan otras medidas como financiamiento estructurado, sin embargo, reconoció que no hay nada definido.

Pemex enfrenta vencimientos de deuda por 4.6 millones de dólares este año y al Estado debe 2 mil millones en impuestos. Además, si bien en el primer trimestre obtuvo ganancias por 57 mil millones de pesos, son la mitad de los reportados hace un año, consecuencia de una caída de 17% en sus ingresos y caída en sus ventas ante menores precios del crudo.