Luis Videgaray comenzó la semana con distintas complicaciones de su círculo de amistades: Baltazar Hinojosa, cercano al secretario de Hacienda de cuando ambos eran diputados, tuvo una derrota monumental en Tamaulipas. Pero los problemas en la política federal no se tomaron una pausa.

José Antonio González Anaya, titular de Pemex le pidió que interceda ante Aristoteles Núñez para que Moises Orozco asuma como nuevo director de Transformación Estatal de la compañía.

Se trata de un asiento clave en el marco de la reforma energética porque es desde donde se debe "achicar" a la empresa productiva del Estado. El problema sería que Núñez quiere retener a Orozco en la nueva área del SAT que justamente tiene que ver con el control fiscal de las petroleras.

Allí Orozco tiene empadronadas 900 empresas vinculadas a la cadena de producción de petroleo y espera que a medida que avance la Ronda Uno la recaudación se convierta en una de las más atractivas para el SAT (actualmente el sector energética aporta el 17% de os ingresos del organismo).

Ya desde el año pasado Orozco sonaba para integrarse al equipo de Pemex pero el nombramiento se demoró por diversos motivos internos, entre los que se cuenta el rechazo del sindicato petrolero al actual funcionario del SAT.

Otra dependencia que en breve podría generar intrigas similares es la dirección de Nuevos Negocios, actualmente controlada por José Manuel Carrera. El futuro del directivo estaría condicionado a que en las próximas semanas Pemex anuncie una alianza de peso con alguna empresa de jerarquía internacional.