Para el Fondo Monetario Internacional (FMI) a México le esperan fuertes choques el año entrante derivado de la prolongada discusión para renovar el TLCAN y de tensiones comerciales en el mundo, por lo que se muestra menos optimista en cuanto a su crecimiento, el cual proyectan, será de 2.7%.

Este pronóstico significa un recorte a su expectativa a inicios de año de que pudiera llegar al 3%. No obstante, aún resulta una visión optimista. Los pronósticos en México fluctúan en un rango entre el 2 y 3%, tal como se estipuló en el último cálculo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHPC).

En su más reciente reporte, el Banco de México (Banxico), consideró que el avance del PIB en 2019 podría alcanzar incluso el nivel más alto de ese rango, mientras que Carlos Urzua, próximo secretario de Hacienda, afirmó que ve un avance del 2.5%.

Lo que al organismo internacional que dirige Christine Lagarde preocupa es la incertidumbre que genera la prolongación de una conclusión respecto al acuerdo trilateral, eso se suma a las tensiones comerciales, que en su opinión "erosiona el sentimiento de confianza de los inversionistas y el mercado financiero (...) lo que impactará en mayores precios de bienes transables, en una disyunción de cadenas de valor, provocará una desaceleración de nuevas tecnologías y la productividad quedará afectada", dicen en el comentario que acompaña a la actualización.

"Más allá de su impacto inmediato sobre el sentimiento del mercado, la proliferación de medidas comerciales podría aumentar la incertidumbre sobre las futuras acciones comerciales que podrían presentarse y que obstaculizarían a la inversión", añadió.

Sin embargo, para este año el FMI dejó sin cambios sus pronósticos hacia la economía del país y continúa previendo un avance de 2.8%.

En cuanto a la perspectiva mundial mantuvo la proyección de crecimiento global en 2018 y 2019 a 3.9%. Sin embargo, el fondo mencionó que uno de los principales riesgos para la economía global son los aranceles, los cuales podrían disminuir la producción hasta 0.5 por ciento respecto a las proyecciones actuales.

"Una escalada de las tarifas a los niveles amenazados por Estados Unidos, China y otros países no sólo tiene un efecto directo en la demanda, sino que elevaría la incertidumbre y dañaría la inversión", agregó el organismo internacional con sede en Washington.