Aunque no lo reconozca públicamente, la aspiración del doctor Hugo López-Gatell a la alcaldía de Coyoacán se complicó en medio de un creciente tensión entre grupos morenistas que lo respaldan y quienes no ven con buenos ojos que sea su candidato en la demarcación.

Gatell comenzó su campaña a la Jefatura de Gobierno asegurando que no tenía un Plan B en caso de perder -como ocurrió- en el proceso de selección interna de Morena. Encuestas aparte, se trata de uno de los perfiles más conocidos del partido marrón en la CDMX.

Con ello en mente, su equipo anunció a la candidata Clara Brugada que pelearía la postulación en Coyoacán. Anunció, no pidió permiso para participar, pues como aseguran en el entorno de la exalcaldesa de Iztapalapa, el epidemiólogo ha pintado su raya anunciando la creación de su propia tribu, "Humanizar la Ciudad".

De ahí los problemas en la definición del nombre del candidato de Morena en Coyoacán, en una demarcación donde claramente no tienen ventaja, pero a diferencia de Benito Juárez y Miguel Hidalgo que ya tienen candidatura en unidad, en la alcaldía del sur Gatell no genera consenso, como pudo saber LPO de fuentes enteradas de las negociaciones.

Brugada comenzó el operativo cicatriz y anunció un "consejo asesor" junto al resto de las corcholatas 

Particularmente en dos equipos han manifestado su desacuerdo por la posible imposición de Gatell. Para empezar, Hannah de Lamadrid quien -junto a Carlos Castillo- desplegó una campaña de promoción desvinculándose del PRI y retando a la hegemonía perredista que Giovanni Gutiérrez heredó de Mauricio Toledo.

Y segundo, en el equipo del diputado morenista Gerardo Villanueva no descansan al difundir que la aspiración del diputado local morenista viene con la bendición del Jefe de Gobierno, Martí Batres, ahora hermano de una ministra de la Suprema Corte de Justicia. Alguien llamó "premio de consolación" a la posible postulación de Gatell, pero entre sus compañeros ven en esto un gesto de "falta de solidaridad y compañerismo" del doctor.