El secretario de Comercio Matías Tombolini expuso este martes ante la Cámara de Diputados y si bien destacó el alcance del programa de "Precios Justos", aclaró que no es decisivo para combatir el alza de precios.

"No es y no podría ser la solución a la inflación, pues la solución, ya lo dijo el ministro (Sergio Massa) es de orden macroeconómico", aclaró, ante la comisión de comercio que preside la radical Gabriela Lena.

"Los programas de precios son una herramienta dentro de un conjunto de herramientas que tienen como objetivo tratar de atender le problema más importante que tiene la Argentina, que es la inflación", lo definió, en una breve introducción antes de someterse a preguntas por poco más de una hora.

Reconoció que hay tensión en el programa por la falta de oferta y exceso de demanda en productos a bajo precio. Y aseguró que hay acuerdos con cadenas de supermercados del interior para que el programa sea federal. 

El radical Martín Tetaz no la dejó pasar: "Quiero saber entonces qué es precios justos. No sé si una promoción, es parte de un programa antiinflacionario, o es un ventilador",  chicaneó sobre el final de la reunión. 

Tombolini no quiso quedarse porque tenía una reunión con la UIA, motivo de quejas de la oposición. Había más de 20 anotados que querían preguntar.

La más molesta era la lilita Marcela Campagnoli. Pedía proteger a empresas perjudicadas por falta de importaciones y lo acusaba de beneficiar a los camioneros y a Molinos Río de La Plata con el fideicomiso del trigo. "Tiene las mismas prácticas que denunciaron de Vicentin", comparó. 

El secretario se comprometió a responder por escrito. Antes había negado ante una consulta de Ricardo López Murphy que exista un atraso en el valor del dólar.

"El tipo de cambio multilateral está en el mismo ratio de 2018", sostuvo, en alusión al momento en que el gobierno de Mauricio Macri inició un período de devaluaciones continuas.

Pero reconoció que las múltiples cotizaciones de la divisa son un problema. "La unificación del tipo de cambio tiene que darse como un punto de llegada".

Las brechas generan asimetrías en la asignación de recursos y eso nos aleja de la posibilidad de pensar el corto plazo saltos en términos productivos.

"Pero es un objetivo compartido y Massa lo dijo: las brechas generan asimetrías en la asignación de recursos y eso nos aleja de la posibilidad de pensar el corto plazo saltos en términos productivos", agregó.

Pese a que la reunión fue minutos antes de conocerse el índice de inflación, la mayoría de las consultas fueron sobre el control de importaciones, sobre todo por las quejas de empresas que no acceden al dólar oficial.

Tombolini pidió conocer cada caso puntual que denunciaron los diputados, pero defendió su política de controlar las divisas.

Mónica Frade, Mariana Stilman (Coalición Cívica) y Martín Tetaz (Evolución Radical)

Fotografía HCD

"Creemos en la administración del comercio en el sentido de que los dólares que se usan para importar, no van a máquinas tragamonedas, a patines de hielo y palos de golf. Sobre todos si son escasos".

"Cuando hablamos de importaciones -continuó Tombolini- tenemos que decir todo: Argentina en el año 2022 importó 81.500 millones de dólares, 29% más que el año anterior. Por supuesto, tenemos el efecto de la importación de energía", informó.

El secretario alertó sobre maniobras para sobrefacturar importaciones y aumentar el stock. "En el trimestre octubre-enero la variación solicitada en importaciones de dólares por parte del sector privado se incrementó un 49%, el Estado autorizó 7% más y continúa en estudio el restante. Peor no está prohibida la importación en Argentina, como país miembro de la OMC", afirmó.

La oposición salió a cruzarlo. "Los palos de golf se consiguen en otro país. El problema lo tienen los que venden acá. Y sino pregunten en Uruguay, que nunca les compraron tantos neumáticos como ahora", respondió la rosarina del PRO Germana Figueroa Casas.

Su coterráneo radical Juan Marín enumeró empresas que no consiguen "cloruro de sodio para la industria láctica, de agua oxigenada para la frigorífica, muchas que impactan en la mesa de los argentinos". 

Tetaz negó que haya habido una mejora de la actividad textil y quiso saber porqué se consulta el stock de las empresas. "Es un actitud de economía planificada", cuestionó.  Tombolini recordó que entre los textiles se identificaron pedidos de importaciones excesivos.

"No sé puede permitir socializar las perdidas. El sector textil tiene que ser parte de las ganancias. Se estaba recuperando de la experiencia de que subsidiaban el despido de empleados. En el gobierno anterior la economía se abrió y se hizo pomada: terminó con menos empleo y pobreza", se defendió el secretario.