El jefe del Frente de Todos en el Senado José Mayans intentará coordinar una sesión el jueves con la oposición, luego de cuatro meses de parálisis por la ruptura de su bloque y la ausencia de Juntos por el Cambio, en represalia al juicio político contra la Corte Suprema que se inició en Diputados. 

Para esta semana hay dos sesiones pedidas por la oposición con temarios similares: una el miércoles por la nueva bancada peronista, unidad federal; y otra el jueves por Juntos por el Cambio.

Coinciden en tratar pliegos judiciales de Santa Fe y Córdoba y la ley para prevenir violencia infantil (un homenaje a Lucio Dupuy, el niño de 5 años asesinado por su madre y la pareja), pero los federales agregan un proyecto para reducir el costo de la energía mediante rebajas fiscales, que ni siquiera pasó por comisión. 

Juntos convocó a una sesión en el Senado y negocia quórum con el peronismo díscolo

Los pedidos de sesión fueron mediante una nota a Cristina, quien debe definir a cuál sesión convoca, porque en el Senado no se estilan las reuniones en minoría como sí son habituales en Diputados. 

Pero la vicepresidenta no puede pisar el recinto esta semana porque reemplaza a Alberto Fernández al frente del Poder Ejecutivo, por su viaje a la cumbre de Iberoamérica. Por lo tanto la definición estará a cargo de la presidenta provisional Claudia Ledesma.

La tomará después de una reunión de labor parlamentaria con los jefes de bloque convocada para el miércoles, cuando Mayans ofrecerá una sesión al día siguiente, con los temas propuestos en las ya convocadas y otros que intentará incluir.

Hay una sesión convocada el miércoles por el nuevo bloque, unidad federal. Y otra el jueves por JxC con un temario similar. El Frente de Todos intentará conciliar una sola reunión. El Senado hace de más de cuatro meses que no se reúne. 

Según anticipó en una entrevista con radio nacional, solicitará sumar la ley de alcoholemia cero, aprobada en Diputados en diciembre (prohíbe tomar una gota de alcohol antes de manejar en rutas nacionales), y otros 40 pliegos de jueces y ascensos militares, que fueron dictaminados el año pasado y no pudieron aprobarse antes de fin de año porque no hubo consenso para sesionar.

 También buscarán sancionar dos leyes aprobadas en Diputados: la de innovación tecnológica, que aumenta el cupo fiscal para la inversión en investigación y desarrollo; y la de enfermería, que crea una carrera profesional para mejorar las condiciones de un sector protagonista de la pandemia.

Esta última fue presentada por el oficialista Pablo Yedlin cuando era diputado y ahora es senador y presidente de la Comisión de Salud. Juntos por el Cambio no tiene reparos con ninguna de estas leyes, aunque la de alcoholemia es resistida por el jefe del interbloque Alfredo Cornejo, radical y de Mendoza. No así por varios de sus correligionarios, como el el jefe Luis Naidenoff. 

El bloque unidad federal: Carlos Espínola, Alejandra Vigo, Guillermo Snopek, María Eugenia Catalfamo y Edgardo Kueider. 

Así las cosas, el diálogo entre las bancadas para destrabar el Senado no estará fácil. Unidad Federal mantuvo su pedido de sesión y está dispuesto a bajar al recinto el miércoles si el Frente de Todos le presta los votos y llegan a 37, el quórum justo que manejó el recinto en 2022.

Pero no todos los oficialistas pueden garantizar que arribarán ese día al recinto. Enterados, los federales (un grupo que integran ex FdT y la cordobesa Alejandra Vigo) evalúan presentarse el jueves con Juntos por el Cambio y dejar al peronismo en minoría por primera vez en más de una década.

El único proyecto del nuevo bloque que no fue incluido en esa sesión fue el de rebaja de impuestos a la energía, una obsesión del entrerriano Edgardo Kueider, que plantea además una redistribución de los subsidios. 

Como ni siquiera tiene dictamen, se conforma con que se le de giro a una comisión y se empiece a debatir. Es lo que le ofrecerá Mayans el miércoles.

 En el Frente de Todos no creen que sus ex compañeros se animen a sesionar con JxC. "Los gobernadores Alberto Rodríguez Saá (San Luis) y Gustavo Bordet (Entre Ríos) no podría volver al peronismo", imaginan.

Para evitar ese ajedrez, Mayans confía en una negociación el miércoles en la que se paute una sesión que al menos evite el papelón de llegar al quinto mes consecutivo sin sesionar y completar el primer trimestre del año sin ninguna actividad. Necesitan un consenso. Y no está nada fácil.