El jefe de Gabinete Juan Manzur envió este martes su informe de gestión con 1950 respuestas a las preguntas de los diputados, ante quienes expondrá este miércoles desde las 11 horas.

En las 2190 fojas las principales consultas son sobre la crisis económica y el tucumano dejó algunas definiciones, como que la inflación es un fenómeno multicausal o que el ajuste iniciado por Sergio Massa continuará hasta cumplir con las metas del FMI.

Despeja cualquier sospecha de devaluación próxima y defiende un incremento permanente de las tasas de interés para mantener el valor del peso ante la suba de precios.

"La tasa de inflación es un fenómeno multicausal, que debe abordarse con un plan macroeconómico integral, que concilie la política fiscal, monetaria, cambiaria, y la coordinación de políticas de precios y de ingresos", es la respuesta general que hace Manzur ante los centenares de preguntas sobre la economía.

Manzur recuerda que el gobierno nacional "se comprometió a cumplir la meta de déficit fiscal del 2,5% del PBI y la meta de emisión, establecida en el presupuesto y en el Acuerdo de Flexibilidades Extendidas con el FMI".

Y para reducir el déficit, señala que "el programa económico tiene como principio el orden fiscal y destaca "el congelamiento de la planta", la "segmentación de los subsidios de tarifas de luz, gas" y el recorte de $210.000 millones.

La tasa de inflación es un fenómeno multicausal, que debe abordarse con un plan macroeconómico integral, que concilie la política fiscal, monetaria, cambiaria, y la coordinación de políticas de precios y de ingresos 

Sobre el combate a la inflación, Manzur no aporta recetas decisivas. Considera que "la suba de tasas es condición necesaria, pero, por sí sola, no suficiente para reducir la inflación".

Menciona "otras políticas y condiciones que contribuirán" como "la consolidación de la estabilidad cambiaria a través de un proceso de acumulación de reservas internacionales", una afirmación que parece alejase de cualquier salto devaluatorio.

Considera que "la brecha cambiaria descendente en los llamados dólares financieros", es "un reflejo de la percepción de que han mejorado los determinantes fundamentales de la macroeconomía".

Y que existe "un nivel del tipo de cambio real multilateral que es adecuado para preservar el superávit de cuenta corriente del balance de pagos en los próximos años".

Destaca que reducir el déficit permitirá menor financiamiento monetario y ya logró "agregados monetarios que han vuelto a los niveles históricos luego del pico observado durante la pandemia".

Además de "una trayectoria descendente del stock de los pasivos remunerados del BCRA (LELIQ, NOTALIQ y Pases) en términos del PIB, como consecuencia de la menor emisión primaria -y, por tanto, menores necesidades de esterilización".

"La convergencia gradual hacia el equilibrio fiscal y una mayor demanda de dinero por consolidación de un proceso sostenido de crecimiento", agrega Manzur.

Y enumera otras medidas como "instrumentos que permiten amortiguar los efectos del shock de precios internacionales, aislando parcialmente la dinámica de precios locales de los internacionales, tales como el recientemente constituido fideicomiso público para el trigo".

Y "acuerdos de precios y salarios que buscan proteger los ingresos reales de la población, a la vez que evitan la amplificación inflacionaria del shock externo reciente mediante la coordinación de expectativas".