Cabral: "Mi remoción es ilegal e inconstitucional"
El juez Luis María Cabral, desplazado de la Cámara Federal de Casación Penal por el Consejo de la Magistratura, denunció que su "remoción es ilegal e inconstitucional" y que el kirchnerismo "lo que hace es manipular el funcionamiento de la Justicia".
"La remoción es ilegal e inconstitucional. El Consejo no tiene las atribuciones (para tomar esa medida)", dijo el magistradoa radio Mitre. "Las motivaciones sería bueno que las explicaran", agregó Cabral, quien ejercía su rol como subrogante en Casación y debía fallar sobre el acuerdo con Irán por la AMIA.
El juez, ex presidente de la Asociación de Magistrados, argumentó que "el Consejo de la Magistratura tiene ciertas atribuciones a partir de la nueva ley para designar subrogantes pero no tiene facultades para remover subrogantes".
"Y lo que ha hecho es una remoción que la propia ley le prohíbe expresamente porque mi designación fue hecha a condición de que se nombre al titular de la vacante que estoy cubriendo", protestó.
El magistrado dijo estar "sorprendido por la forma en la cual se conduce del Consejo de la Magistratura", manejado por el kirchnerismo a partir de los siete votos seguros que tiene, incluido el de la presidenta del organismo, María Gabriela Vázquez.
"(Ese cuerpo) está a cargo de garantizarle la independencia a los jueces, de asegurarle su jurisdicción y, lejos de eso, lo que hace es manipular el funcionamiento de la Justicia", denunció Cabral.
Ayer, el kirchnerismo en el Consejo de la Magistratura de la Nación dio por concluida la subrogancia en la Cámara Federal de Casación Penal de Cabral y, en su lugar, nombró a un conjuez allegado a la Casa Rosada.
Con esto, el Gobierno apartó a uno de los camaristas que casi con seguridad votaría por ratificar la inconstitucionalidad del memorándum con Irán, resolución que el lunes pasado fue pospuesta de manera sospechosa por la presidenta de Casación, la zanninista Ana María Figueroa.
Como reveló LPO, en ámbitos judiciales se sospecha de una maniobra acordada entre la Casa Rosada y el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, que le habría soltado la mano a Cabral. También generó suspicacias la ausencia de los consejeros radicales, que habrían recibido un pedido de Ernesto Sanz.