Los candidatos de Cambiemos que Vidal mandó a "revisión"
María Eugenia Vidal miró el mapa del Conurbano y evaluó en qué municipios tienen chances reales de ganar en el 2019. Con ese análisis mandó a "revisión" a varios de sus referentes en los distritos no gobernados por Cambiemos, convencida de que podría encontrar candidatos que le rindan mejor.
La orden de la gobernadora había sido que este año todos los "sin tierra" encabezaran las boletas en sus municipios. Muchos de ellos ostentan cargos importantes en Provincia o Nación y no les resultaba un plan tentador desembarcar en los concejos deliberantes locales, pero los incentivaron prometiéndoles que la campaña los catapultaría para pelear las intendencias dentro de dos años.
Sin embargo, después de la elección desde el PRO hicieron una nueva lectura que compartieron con LPO: "El 22 de octubre demostró que lo que gana es la marca Cambiemos, así que ningún candidato tiene la vaca atada. Sobre todo los que pensamos que no marcaron la diferencia".
Con esa frase aclaran que hay unos pocos casi indiscutidos -porque se "ganaron" el lugar- pero la mayoría no corre con esa ventaja. A Gabriel Kunz (Berazategui) y Miguel Saredi (La Matanza), ya les encontraron sustitutos. A los aliados Assef (Moreno) y Cariglino (Malvinas Argentinas) los ponen en duda, al igual que a candidaturas como la de Carlos Regazzoni (Almirante Brown) o Sebastián Vinagre (Avellaneda).
En Berazategui creen que para destronar a los Mussi necesitan un hombre fuerte y ya comenzaron a correr a Kunz. En rigor, en ese distrito Vidal tiene una carta guardada de la que supo LPO: el secretario general de la Provincia, Fabián Perechodnik, que ofició como "facilitador" en el distrito y buscan instalarlo como candidato. Saben que se avecina una interna intensa, porque Ricardo Giacobbe le disputará el lugar con el aval de Emilio Monzó.
Los "Sin Tierra" en su almuerzo con Macri antes de las PASO
En el bastión peronista de La Matanza quieren que el candidato sea el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro. Contra su pesar, el macrismo llevó a Miguel Saredi en la boleta de esta elección, pero desde hace tiempo que hablan de instalar al funcionario que asumió para reemplazar el puesto que dejó vacante de Esteban Bullrich.
Saredi fue candidato en los últimos dos comicios y cree que no podrán negarle la interna. En el PRO ya sugieren que la estrategia será "cansarlo" hasta que se vaya, pero se anticipa que el dirigente matancero no querrá darles el gusto.
Vidal también quiere avanzar contra Jorge Ferraresi, uno de los intendentes más ligados a Cristina Kirchner, y por eso cree que debe jugar fuerte en Avellaneda, envalentonada por los buenos resultados que sacó Cambiemos en la última elección. Por eso, el dirigente Sebastián Vinagre quedaría corto para la jugada y apuesta a que Gladys González encabece la pelea en el municipio.
Un intendente de Cambiemos reveló a este medio que la propia gobernadora habló con la senadora electa para decirle que esté dispuesta a jugar. Si bien puede no resultar una oferta ambiciosa tener que irse de la Cámara alta, sugirió que le pedirán "una muestra de amor".
Rodrigo Valladares de Macri, Albi Czernikowsk y Alex Campbell
Albi Czernikowski perdió la interna contra Maximiliano Cariglino en Malvinas Argentinas. Dolido, el ex de Karina Jelinek se corrió de la campaña e incluso se quejó de que después de las PASO sólo lo llamaron para pedirle unas sombrillas.
Sin embargo, Albi volvió a la calle en el último timbreo de "agradecimiento" de Cambiemos y ahora espera que Federico Salvai lo habilite a arrancar la discusión interna. Dice que no quiere que repitan la historia de 2015, cuando le avisaron unos días antes de la elección que debía competir, y especula con que los Cariglino serán siempre candidatos "prestados" con el riesgo de que se pasen de bando a último momento.
Tras su salida del PAMI, Carlos Regazzoni se dio un baño de humildad y aceptó ser candidato a concejal en Almirante Brown, pero los resultados lo dejaron a 12 puntos de la lista de Unidad Ciudadana. En Cambiemos circula la versión de que le pidió a Macri volver a la gestión, pero él aseguró a LPO que quiere "pelear por la intendencia", una chance que en el gobierno de Vidal por ahora ponen en duda.
Regazzoni de campaña en Brown
Fuentes de Cambiemos explican que hay varios municipios en los que no pueden dar por confirmados los candidatos, pero que no surgen dirigentes con suficiente volumen local para disputarles el liderazgo.
Un caso es el de Moreno, donde Leo Cóppola quiere instalarse y correr a los Assef, pero no se definió cuál será la jugada. Otro caso es el de Ezeiza, donde nadie confía en que el veterinario Rubén Barabani pueda hacer una buena elección.
"Tampoco es necesario -ni posible- ganar en todos lados", resumen fuentes de Cambiemos a este medio, confirmando que ya anticipan que no jugarán con la misma fuerza en todos los municipios. Eso también es un guiño al histórico barón de Ezeiza, Alejandro Granados, un aliado de Cambiemos que no blanqueará su pase pero les juega a favor. Por eso no niegan que tal vez puedan repetir la estrategia de ponerle en frente un candidato débil.
En Cambiemos por ahora hay alivio para la lista de indiscutidos que empezó a escribirse con los nombres de Lucas Delfino en Hurlingham, Pablo Alaniz en Florencio Varela, Evert Van Tooren en Esteban Echeverría y Gabriel Mercuri en Lomas de Zamora.
Gabriel Pozzuto tiene el lugar asegurado en Ituzaingó con el aval de su vecino de Morón, el intendente Ramiro Tagliaferro. También quedaron firmes Segundo Cernadas en Tigre, que tiene el visto bueno de José Torello, y Alex Campbell en San Fernando, cercano a Vidal, ambos de festejo por sus buenos resultados en el epicentro massista.