Reuniones de último momento, negociaciones con sectores opositores, llamadas cruzadas entre senadores y diputados para coordinar acciones, ese fue el escenario de la Legislatura durante la jornada de hoy. Finalmente el Ejecutivo cedió algunos cambios al proyecto de reforma impositiva y nuevo endeudamiento solicitado por Daniel Scioli y logró los apoyos mínimos para poder llevarlo mañana al recinto del Senado.

Las modificaciones más significativas fueron la incorporación de otros $200 millones en el giro de recursos para las comunas, un cambio que establece ahora un permiso de endeudamiento que llega a 2.200 millones.

Según la iniciativa primaria, los municipios sólo recuperarían 450 millones. Ahora, con estos nuevos números se acercan a la posición de las bancadas de la oposición que reclamaban la restitución de los $920 millones que pasaron a conformar un fondo educativo en detrimento de las arcas municipales.

Además, se resolvió eliminar el artículo 22 que limitaba el cobro de impuestos por el uso de espacio de antenas a los municipios que se incorporen al Fondo, lo que perjudicaba a algunos municipios para cobrar impuestos.

Con los cambios en el texto, el Ejecutivo logró el guiño de algunos sectores opositores, en particular el apoyo del radicalismo y el GEN quienes votarán los artículos del endeudamiento -para el que se necesitan dos tercios-, pero se mostraron en contra del aumento impositivo, una iniciativa que el oficialismo puede aprobar sólo con mayoría simple.

“Sin fondos frescos Scioli no puede pagar los sueldos, si no fuera por eso nosotros tampoco acompañaríamos el endeudamiento”, explicó el senador radical Roberto Costa tras el plenario de comisión.

Con todo, el proyecto sería aprobado mañana en la Cámara Alta con lo justo e inmediatamente girado a Diputados, que tiene pautado sesionar mañana mismo. Allí, el escenario es un poco más complejo toda vez que el oficialismo necesita los dos tercios para poner el proyecto en tratamiento.

Protesta de las entidades rurales en La Plata

La intensión del oficialismo es votar el proyecto mañana en ambas cámaras, al mismo momento que las principales entidades rurales de la Provincia marcharán a la capital provincial para visibilizar el reclamo y reunirse con legisladores a los que pedirán que no voten la suba en el Impuesto Inmobiliario Rural, incluida en el proyecto tratado en comisión durante los últimos días.

Además Carbap, Federación Agraria Argentina y Sociedad Rural, iniciarán a partir de esta medianoche un cese de comercialización que incluye granos y hacienda en pie con destino a la industria y la exportación y excluye los productos perecederos.

En medio del paro, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) realizará una serie de asambleas “de esclarecimiento” y movilizaciones en varios distritos de la provincia como Carlos Casares y 9 de Julio.

El malestar de las entidades se disparó por la intención del Gobierno provincial de aumentar por segunda vez en el año el Inmobiliario Rural. Aunque, según el Ejecutivo, las subas no superarán el 50 por ciento, las entidades aseguran, en base a cálculos propios, que los incrementos llegarán hasta el 500 por ciento en los campos más productivos.

Pero más allá del aumento concreto, la bronca de los ruralistas responde al revalúo fiscal de los campos realizado por el Gobierno de Scioli para calcular la suba del Inmobiliario.

Es que el revalúo –que llegará en algunos casos al 2 mil por ciento- no sólo impactará en el Inmobiliario sino que, advierten las entidades, aumentará en forma automática los tributos nacionales Bienes Personales y Ganancias que se calculan sobre el valor de los campos.