Donald Trump desempeñará dos papeles en simultáneo. El de candidato a presidente por el conservador Partido Republicano y el de acusado por intentar sobornar a una estrella porno a cambio de silencio. El primer juicio penal contra el líder MAGA empezará el próximo 25 de marzo y durará unas seis semanas. Así lo resolvió el juez colombiano de Nueva York Juan Manuel Merchan, quien nació en Colombia y emigró a los 6 años a los Estados Unidos. 

La decisión fue escuchada en persona por Trump. La de este jueves fue la primera visita del republicano a la corte de Nueva York desde que la acusación lo convirtió en el primer expresidente acusado de un delito. Desde entonces, sumó imputaciones en Florida, Georgia y Washington, D.C. 

El cronograma fijado por el latino Merchan obligará a Trump a hacer campaña mientras se desarrolle el juicio en su contra. Para el 25 de marzo, probablemente Trump ya sea el único candidato republicano en carrera. El supermartes del 5 de marzo será un mojón clave de las primarias. Ese día, el exponente MAGA podría resultar el elegido por el GOP para competir contra Joe Biden. Ante ese panorama, el equipo trumpista pretendía patear los juicios para después de la votación presidencial de noviembre.

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"Es completamente una interferencia electoral decir 'te vas a sentar en esta sala del tribunal en Manhattan', cuando no hay ninguna razón", se quejó ante Merchan el abogado Todd Blanche, representante de Trump. Ya en los pasillos de la corte neoyorquina, Trump les dijo a los periodistas que el juez buscaba perjudicarlo políticamente y que el caso interfiriera en la campaña.

"¿Cómo puedes presentarte a las elecciones si estás sentado en un juzgado de Manhattan todo el día? Se supone que debería estar en Carolina del Sur ahora", protestó Trump.

"Es completamente una interferencia electoral", se quejó ante el juez Merchan el abogado Todd Blanche, representante de Trump. Ya en los pasillos de la corte neoyorquina, Trump les dijo a los periodistas que el juez latino buscaba perjudicarlo políticamente y que el caso interfiriera en la campaña.

El colombiano Merchan se mantuvo firme. Incluso argumentó ante el abogado Blanche que ya había considerado y rechazado su posición. En un momento lo frenó: "¡Deje de interrumpirme, por favor!". 

AP

De 60 años y nacido en Colombia, Merchan emigró cuando tenía 6 años y creció en Nueva York. Es el primer miembro de su familia en ir a la universidad, obteniendo un título en derecho en Hofstra en 1994. La defensa de Trump planteó meses atrás que Merchan era parcial y tenía un conflicto de intereses. El republicano llegó a decir que el juez lo odiaba.

Tras esa estrategia para correrlo, este latino respondió que, tras examinar su conciencia, se sentía seguro de su capacidad para ser justo e imparcial. Pero a su vez reconoció haber donado 15 dólares a la campaña del presidente Joe Biden y 10 a la causa Stop Republicans.

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El caso de Nueva York es considerado como el menos amenazante, tanto en términos legales como políticos, de las cuatro acusaciones que enfrenta Trump. Se trata de una causa por mala conducta, conocida desde hace años. En comparación, parecen más graves las imputaciones por haberse apropiado documentos clasificados y la de alentar una conspiración para desoír el resultado electoral de 2020.

La causa se centra en supuestos sobornos pagados a dos mujeres, la actriz porno Stormy Daniels y la ex modelo de Playboy Karen McDougal. También, a un ex portero de la Torre Trump, quien afirmó conocer una historia sobre un supuesto hijo extramatrimonial de Trump. El ex presidente negó todas las acusaciones. 

De 60 años y nacido en Colombia, Merchan emigró cuando tenía 6 años y creció en Nueva York. Es el primer miembro de su familia en ir a la universidad. La defensa de Trump planteó que Merchan era parcial y tenía un conflicto de intereses. El republicano llegó a decir que el juez lo odiaba.

En el último tramo de la campaña de 2016 contra Hillary Clinton, el abogado de Trump de aquel momento, Michael Cohen, le pagó a Daniels 130.000 dólares. Y orquestó otro desembolso de 150.000 dólares para McDougal. En ambos casos el objetivo era silenciar incómodas historias de affaires con ambas mujeres. El equipo legal de Trump argumentó que no se cometió ningún delito.

Pese a esa defensa, el juicio contra Trump comenzará en 39 días. Y pondrá a prueba la hipótesis de que la acumulación de causas sólo victimiza y beneficia al republicano. Con la particularidad de que, esta vez, el juicio no será una abstracción o un anuncio a futuro con fecha incierta. Trump se sentará en el banquillo de los acusados en Manhattan.