A causa de un severo estrangulamiento financiero, el priista Esteban Villegas asumió este mediodía el Gobierno de Durango en condiciones complicadas. En el acto, donde no mencionó por su nombre al gobernador saliente José Rosas Aispuro, lamentó el estado que guardan las finanzas del gobierno pues no solamente es malo sino "catastrófico". Por lo que advirtió que el reto en este ámbito es "inmenso".

"Lo diré una sola vez, porque soy un hombre al que le gusta empeñar su palabra, lo diré una vez porque no soy un hombre de pretextos: el reto es inmenso", dijo. Y reveló que hasta este jueves 15 de agosto, no había dinero suficiente para pagar la nómina del Gobierno de Durango.

Sin embargo, adelantó que gracias a la gestión del presidente López Obrador se tendrán 300 millones de pesos para hacer frente a esta deuda. "Hasta hoy no había un solo peso para pagar la nómina del gobierno, hoy en una plática, por instrucciones del Presidente de la República, en un plazo de 10 días, tendremos los 300 millones de pesos, que nos faltan. ¡Gracias, secretario! ¡Gracias Presidente! ¡Durango está de pie!", dijo.

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El mensaje del nuevo gobernador de Durango, inició con un agradecimiento: "Darle las gracias primero a Dios, a la vida, por darnos esta gran oportunidad, ¡gracias Durango!".

Y continuó con una mención especial para los trabajadores de la salud, gremio al que pertenece de profesión: "les reitero mi respeto y agradecimiento a todas y todos los trabajadores y trabajadoras del sector salud, mi completo respeto a mi gremio y a sus necesidades; mi respaldo total a todos los trabajadores del sector salud", dijo.

Frío encuentro

En la ceremonia, los dirigentes del PAN y del PRD pidieron ser sentados separados de Alito. Y lo que hasta hace unos días hubiera sido una muestra de unidad, hoy se pudo observar un distanciamiento marcado. Cortés y Zambrano en primera fila, mientras se pudo apreciar a Moreno en otra parte del auditorio.

El dirigente de Acción Nacional fue claro sobre la separación, no habrá más relación con Alito porque, "se perdió la confianza", lo cual es una declaración interesante, ya que no esta cortando relación con el PRI como tal, solo con su presidente nacional.

"Hemos dicho con claridad que no habrá ya relación porque ya se perdió la confianza con la dirigencia nacional del PRI, porque se deshonró la palabra y se incumplieron los acuerdos", mencionó Cortes.

Mientras los dirigentes presumieron en sus redes sociales fotos entre abrazos y sonrisas con sus correligionarios y con el nuevo gobernador, en algunas de ellas se podía apreciar a un Morena y a un Rubén Moreira alejados.

"Nosotros estaremos observando cómo votan las y los senadores del PRI, esperemos que sean consistentes con lo que han dicho hasta ahorita, que van a votar en contra y a partir de ahí, yo convocaré a los órganos del partido para en su momento tomar una definición", remató Marko Cortés.