La corrida cambiaria y el salto del dólar blue llegaron en el momento más inoportuno para varios gobernadores peronistas que en los próximos veinte días deberán ir a las urnas para mantener el control de sus provincias.
La disparada de casi cien pesos del dólar paralelo en las últimas dos semanas tendrá un inevitable impacto en los precios y alimentará una inflación que ya venía desbocada.
Como reveló LPO, las consultoras privadas ya ubican la suba del precio de los alimentos en torno al 8 por ciento, pero todavía esos números no reflejan el impacto de la disparada de los dólares paralelos. Las proyecciones indican que abril podría terminar con un incremento del IPC del 9%, tras el 7,7% de marzo.
En todas las encuestas la inflación aparece como la principal preocupación de los argentinos y en las provincias el tema empieza a golpear a los gobernadores, especialmente a los alineados con el gobierno nacional.
El problema para varios de ellos es que el previsible nuevo salto se dará en los últimos días de campaña. El 7 de mayo próximo serán las elecciones a gobernador en La Rioja, Misiones y Jujuy, mientras que el 14 de mayo se elegirá en La Pampa, Tucumán, San Juan, Salta y Tierra del Fuego.
En Jujuy gobierna Juntos por el Cambio y el radicalismo es amplio favorito ante un peronismo dividido y sin chances. En Misiones, el Frente Renovador de la Concordia provincializó al máximo la elección y es favorito a retener la gobernación, según los datos de encuestadores consultados por LPO.
En La Rioja el panorama está más abierto. El gobernador peronista Ricardo Quintela, uno de los más cercanos a Alberto Fernández, la tendrá peleada ante el larretista Felipe Álvarez, que logró mantener unida a la oposición. Para peor Quintela tuvo que abandonar la campaña por un problema de salud.
En el peronismo dicen que el impacto inflacionario puede ser un factor decisivo en el final de la campaña. El humor social -admiten- no es el mejor para ir a elecciones en este momento y hay temor por el voto castigo. Ese voto castigo a nivel nacional parece ir hacia Javier Milei, pero el economista libertario no ha logrado articular en las provincias y prácticamente no tiene candidatos de peso, salvo Ricardo Bussi en Tucumán. Es por eso que los gobernadores temen que esa furia favorezca a JxC.
El panorama es mejor para el peronismo el domingo 14, pero igualmente hay preocupación. Fuentes del peronismo tucumano admitieron a LPO que la aventaja que mostraba la fórmula de Osvaldo Jaldo y Juan Manzur sobre la de Juntos por el Cambio en las encuestas parece haberse recortado y el escenario es más parejo.
Algo similar sucede en San Juan, donde Sergio Uñac va por la reelección. En el peronismo sanjuanino ven que se achicó la diferencia en los últimos días y ven cierta paridad con el opositor Marcelo Orrego, que también logró la unidad de JxC. En la provincia el PJ tiene la ventaja de haber impuesto la Ley de Lemas y que los votos de José Luis Gioja sumarán para Uñac.
En La Pampa el gobernador Sergio Ziliotto es favorito a quedarse con la reelección ante el radical Martín Berhongaray, aunque en el peronismo dicen que no esperan una diferencia muy abultada y admiten que hay riesgo en algunas ciudades importantes.
En Salta el massista Gustavo Sáenz se enfrenta a una oposición fragmentada, lo mismo que Gustavo Melella en Tierra del Fuego. El gobernador logró alcanzar una dificultosa alianza con los intendentes de La Cámpora y celebró la división de Juntos, pero el electorado de la isla suele dar sorpresas.
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Venías por autopista, hiciste dos maniobras algo jugadas, bajaste por colectora; y te perdiste.-
Que pena.-