Para pelear cargos en los organismos públicos de la Ciudad, como el Consejo de la Magistratura y la Auditoría General, el Frente para la Victoria se unió temporalmente en la Legislatura con los bloques de Diálogo por Buenos Aires y Nuevo Encuentro.
El interbloque alcanzó los 15 diputados, lo que le permitirá a esta flamante alianza encarar las negociaciones con el PRO desde un lugar de privilegio, superando holgadamente al resto de las fuerzas como Proyecto Sur y la Coalición Cívica.
Con los candidatos a la Auditoría ya presentados y con el desembarco prácticamente cerrado de Juan Manuel Olmos en el Consejo de la Magistratura, uno de los puestos a los que apuntará el pankirchnerismo y que aún no tiene postulante definido es el de la vicepresidencia segunda en la Legislatura.
El cargo lo ocupa actualmente Julio Raffo, de Proyecto Sur. Pero a partir de diciembre la fuerza de Pino Solanas tendrá 11 diputados contra los 15 del interbloque kirchnerista, por lo que se debería conformar con la vicepresidencia tercera que hoy ocupa Sergio Abrevaya, de la Coalición.
Como nadie discute que el jefe del interbloque será el camporista Juan Cabandié, en las fuerzas afines al Gobierno nacional se está analizando si la vice segunda le corresponde a otro kirchnerista o a alguien del sector de los aliados.
Las figuras de renombre en el sector aliado son tres: Aníbal Ibarra, Gabriela Cerruti y Susana “la Tana” Rinaldi.
Pero ni Ibarra ni Cerruti tendrían intenciones de ocupar ese puesto. En tanto que Rinaldi aún no definió si asumirá la banca.
Es por eso que el kirchnerismo se relame esperando controlar, además del intebloque a través de Cabandié, al vicepresidente segundo. El principal candidato es el actual diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo.
El “Canca” Gullo es un referente para el peronismo de la Ciudad por su militancia en la JP de los setenta. Quien le podría obstaculizar la llegada a la vice es Alejandro Amor, el secretario gremial de Sutecba, el sindicato de trabajadores municipales de la Ciudad.
Aunque Amor tiene menos chances por su fluida relación con el macrismo a través del gremio, por lo que el kirchnerismo podría optar por una figura más opositora como la del “Canca”.