Eduardo Duhalde aprovechó los problemas de Ricardo Alfonsín y Francisco De Narváez para definir sus candidaturas y volvió a sus orígenes: comenzó a identificar a los heridos de cada distrito y los invita a sumarse a sus filas.

La propuesta es tentadora. Consiste en habilitarle una lista a cada dirigente peronista que por estas horas negocia tenerla en el frente de radicales y denarvaístas, en el que hasta la semana pasada ambos repetían que iban a evitar dirimir candidaturas en la interna abierta del 14 de agosto.

Duhalde hizo todo lo contrario: les aclaró a cada dirigente que lo acompaña que anotará a todos los candidatos que tenga por cada comuna y que defina su suerte en las urnas.

Con ese esquema en la mano se comunica con dirigentes que están esperando noticias desde el bunker de De Narváez en Las Cañitas y les abre un lugar entre los suyos.

“Anotá una lista. Si después arreglas con el colorado tenes tiempo para bajarla”, propone. Ese tiempo es el de “impugnaciones y tachas”, que la justicia abre para corregir o eliminar listas. O sea, no hay nada para perder.

El quilmeño Ángel Abasto, histórico duhaldista, tiene la misión de contactar dirigentes y pasarles de inmediato con Duhalde. En la tercera sección ya escuchó esa oferta José Alessi, de Avellaneda, donde también se comunicaron con otros dirigentes del peronismo sin demasiadas aspiraciones.

“La oferta es buena, porque les garantiza participación y definición por sus propios medios. En cambio con De Narváez no sabes si vas a poder participar”, explicó a LPO un dirigente que pasa estas horas en Las Cañitas y recuerda todavía los desaires de 2009, cuando fueron muchos los que se quedaron en la puerta de las listas de Unión Pro.

Ayer pareció que hubiera coordinado con el líder radical Leopoldo Moreau, con quien cuando era gobernador negociaba presupuestos y cargos en los organismos de control. Mientras "el marciano" amenazaba con presentar candidatos en todo el conurbano, Duhalde ofrecía listas a los peronistas de la región hasta ahora apoyan a De Narváez.  

Alertados por esta situación, ayer el legislador porteño Daniel Amoroso cambió de discurso: dijo que si era necesario habrá internas en los 134 distritos. La cuestión es si sus seguidores prefieren competir en agosto con un radical o hacerlo con otro peronista. Son las opciones que tienen.